Quiero, sin que se interprete como una forma de herir susceptibilidades, plantear a manera de llamado de atención a los líderes y lideresas de los procesos sociales, culturales, políticos, económicos y ambientales del Caribe Colombiano y en especial del Territorio Montemariano, para que dejemos de usar las redes sociales, ya sean individuales o de grupos, para publicar frivolidades, comentarios sin sentido, y cambiemos estas por interesarnos por los grandes temas del país y la región que nos atañen, por que favorecen o lesionan nuestros intereses, tales como el tema tierra, educación, salud, vías, medio ambiente, politiquería, corrupción, con esto quiero decir que como lideres o lideras dejemos de pensar en lo cotidiano, lo micro, que es lo que observamos en cada evento que se desarrolla en la región y abramos debates por los grandes temas del País..
Sin dejar de lado la realidad que hemos tenido un Estado de espalda a la región y sus comunidades, que permitió la barbarie del despojo de los bienes de los campesinos, las masacres, asesinatos selectivos, no podemos seguir “llorando como los pobrecitos, los desvalidos, los abandonados” como suscitando la lastima de ese Estado que se rige por una constitución que en sus artículos 1 y 2 enuncia:
*Colombia es un Estado social de derecho, organizado en forma de República unitaria, descentralizada, con autonomía de sus entidades territoriales, democrática, participativa y pluralista, fundada en el respeto de la dignidad humana, en el trabajo y la solidaridad de las personas que la integran y en la prevalencia del interés general.
* Son fines esenciales del Estado: servir a la comunidad, promover la prosperidad general y garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes consagrados en la Constitución; facilitar la participación de todos en las decisiones que los afectan y en la vida económica, política, administrativa y cultural de la Nación; defender la independencia nacional, mantener la integridad territorial y asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo.
Pero que lejos de llevar a la práctica estos enunciados, que parecen letras muertas, tenemos un Estado que legisla, ejecuta, controla, y hace justica para una parte de la comunidad, o sea los mas poderosos, haciendo cada vez mas pobres a los pobres, avalando el criterio que lo que necesitamos es desarrollo económico, e inversión en asistencialismo, justificando la limosna de los programas como “mas familias en acción”, que con el animo de perpetuar la dependencia los mas pobres, de los políticos que ejecutan estos programas, ampliando con ellos su clientela y sus empresas electorales a través de la política de favores.
Por ello la intención de publicar artículos que tiene que ver con el debate publico de la construcción de un Estado social y de derecho, partiendo de exigir el fin del conflicto, e introducir profundas reformas al actual sistema de gobierno y sus instituciones, con nuevas pautas para el cumplimiento de la ley por parte de los funcionarios, es la propuestas que hacemos a lideres y lideresas, para participar del debate en los eventos locales, regionales y nacionales y dejar el “Lloriqueo y superar la discusión del yo con yo”.
Es preocupante por ejemplo, que en Montes de María luego de 11 años de intervención de la Cooperación internacional, el gobierno de Colombia, las ONGs, sigamos sin tener un movimiento social que concite los intereses generales del territorio y sigamos como pequeñas islas, en un océano de políticas publicas, intereses económicos, políticos, económicos distintos a los de las comunidades y lo que es peor aun, que algunos de los líderes y lideresas estén al servicio de esos intereses individuales, olvidando de donde binen y cual fue la causa de su surgimiento como tal.
Invito entonces a los líderes del Caribe Colombiano y de Montes de María, a UNIRNOS en torno a un movimiento inicialmente virtual que participe de las discusión de los grandes temas como la educación, especialmente por una educación pertinente, pero también por la cualificación del gremio de docentes para que no sigan siendo tratados y remunerados por estratos, que los rectores ejerzan su labor de gerentes honestos de las instituciones, invirtiendo bien los recursos de calidad educativa, siendo los lideres para la articulación de las áreas y del compañerismo entre docentes, concientizando a los docentes para que no sigan lleno a las aulas a cumplir horario sino a ejercer la profesión mas diga del ser humano, por que es demasiado serio que los padres de familia pongamos en manos de éstos la responsabilidad de nuestros hijos, y desafortunadamente soy testigo de ver por lo menos cuatro generaciones de alumnos sin cambios en su estructura social y política, indicio que la gestión social del docente no esta funcionando.