Que los libros estén en las librerías… eso no es novedad, pero que los domingos los libros se vayan a un parque en buscar lectores, ese es otro asunto.
Gracias a Héctor Mauricio Muñoz Serna, todos los domingos, en el Parque El Peñón de Cali, los libros se muestran a cielo abierto. No es extraño toparse con un libro de Germán Castro Caicedo, que nos habla de Una verdad oscura; o ver que Antonio Caballero pronostica 15 años de mal agüero o descubrir a Laura Restrepo con un Leopardo al sol.
Héctor Mauricio Serna, es un librero que hace parte de la un grupo de Libreros Independientes. Busca con su oficio ser divulgador de conocimiento, en especial de las ciencias humanas y sociales. Su librería se llama “Apapachos” que en lengua indígena significa abrazar con el alma. “Creemos –dice– que los libros están ahí para abrazarlos y de paso el alma del escritor y los personajes que están en cada texto. Estamos convencidos de que cada libro tiene un alma: la del escritor y las experiencias que tuvo que haber vivido para escribirlo y además los libros permiten que las personas se entiendan mejor a sí mismas”.
El sentir de Héctor es que si la gente no se acerca a los libros, los libros se deben acercar a la gente; cruzarse en sus caminos. “Esto es muy bello” –dice- porque en ocasiones encontramos a personas que dicen cuando llegan a mi puesto: “Yo no estoy leyendo y creo que debería leer” y lo toman como un aviso del destino y entonces se llevan a su casa un libro.
En otras ocasiones, como ocurrió mientras hablábamos, una persona vio un libro de Stephen King y dijo: “Este no lo he leído, nunca lo había visto”, y lo compró mientras la alegría de haber encontrado ese volumen ponía una sonrisa en su rostro. “Es muy grato para mí que el transeúnte se encuentre con libros que quiere en la calle”.
Para el lector que compra libros en la calle, hay una ventaja, y es la de la oportunidad. Porque muy seguramente los libros que encuentra en el puesto de Héctor, se pueden encontrar en otro lado, pero es ese encuentro, fortuito, al azar que hace especial el momento y la compra. Es la oportunidad de adquirir un libro en un lugar inusual y en un momento que no estaba destinado para esa compra.
¿Tienen precio diferente los libros que ofrece aquí en el Parque?
“Los libros nuevos no, pues respetamos mucho el valor del mercado. Pero los libros usados o leídos –me gusta más ese término– por lo general tienen precios muy económicos. Hoy, por ejemplo, tenemos muchos libros a 12 mil pesos. Son libros en muy buen estado y que ya no se ven mucho en el mercado”.
¿La gente busca, o encuentra a los libros?
“Mi experiencia es que la gente encuentra. Más que buscar al libro, el libro pareciera que lo encuentra a uno. Eso es algo bello y extraño. Es esa oportunidad de la que le hablaba hace un momento”.
Según su percepción, ¿qué tal es el lector caleño. Lee mucho, poco, o los precios lo alejan de la lectura?
“Mi percepción al respecto y basándome en informes que he leído sobre los hábitos de lectura en Colombia, es que por lo general los colombianos leemos poco y Cali, creo que esté entre las ciudades que menos se lee porque nuestra atención está más centrada en otro tipo de actividades: fiesta, rumba, fútbol”.
Según estudios, en lectura de libros Argentina encabeza el conteo con un índice del 55 por ciento, le sigue Chile con el 51, Brasil, 46 y Colombia el 45. Claro que debajo de nosotros están Perú y México con el 35 y 20 por ciento respectivamente.
“Chile y Argentina encabezan la lista de cantidad de libros leídos al año por habitante, con 5,4 y 4,6, respectivamente, frente a los 10,3 de España, mientras que México y Colombia, con 2,9 y 2,2, están al final de la lista” dicen los informes.
Sobre la lectura en Cali, Héctor agrega: “Yo creo que en la ciudad se está viviendo un cambio y parecería ser que las personas están buscando oportunidades de reflexión y esto puede tener origen en lo ocurrido recientemente con la pandemia, y el libro es visto como fuente de reflexión. Yo he descubierto que en estos espacios públicos la gente se acerca a ver los libros, bueno, al menos los ven y se interesan por algunos títulos y se nota un cambio en la intención de lectura”.
¿Cómo ve la actitud de los jóvenes entre los libros y el computador. Porque la gente dice que los jóvenes no leen por estar en las redes.
“Yo creo que los muchachos leen. Pienso que no hay conflicto entre una y otra actividad, lo que hay que preguntar es: ¿por qué lees y para qué lees? Cuando esos interrogantes empiezan a ser respondidos, las personas, se van acercando a los textos que conllevan más reflexión, pensamiento crítico, que es la literatura, la filosofía y todo lo demás”.
“Hay varios tipos de lectores y no creo que haya un lector ideal. La lectura es lectura. También existe la idea de que quien lee es el que más sabe, de que quien lee es el referente de persona ideal y eso no es así. De hecho han existido grandes escritores y lectores que también han sido asesinos. Hitler, por ejemplo, era un hombre muy letrado y toda su cúpula también lo era y recuerde lo que ocurrió”.
“A mí me gusta mencionar una frase que le he escuchado a Mario Mendoza, en la que dice que quien lee vive muchas vidas. Y pienso que la lectura es una manera de vivir muchas vidas. Es una manera de entender que no solo es mi realidad, sino que hay otras realidades. Al percatarnos de esas otras realidades se comienza a entender que uno no está tan importante, sino que hay otras realidades que merecen ser entendidas y escuchadas. Esto puede abrir las puertas hacia la escritura, por ejemplo, o hacia otra cantidad de sensaciones que cada cual ira abordando”.
¿Qué es lo que la gente busca más para leer?
“Bueno, yo manejo mucho los temas de literatura universal y temas filosóficos. Entonces quien se acercan a mi sitio van a encontrar esa temática. Pero me preguntan mucho por libros de crecimiento o superación personal. Es un tema que la gente viene consumiendo mucho porque tratan de encontrar respuestas a preguntas de su propia existencia: ansiedad; problemas familiares, de desafecto, etc”.
¿Qué es lo mejor de leer para usted?
“Todo en la lectura es bueno. Es un universo de posibilidades y de encuentros”.
¿Un escritor que le gustaría leer muchas veces?
“A mí me gusta Stefan Zweig.
¿Un escritor que nunca recomendaría?
“No me atrevería a hacerlo. De hecho, un escritor, así sea perverso, merece ser leído porque se tomó el trabajo de escribir. Aquí, hace algunos días, tuve el libro “Min Kamp”, Mi lucha de Hitler y algunas personas me recriminaban: usted por qué ofrece ese libro. Yo les decía que hay quienes desean saber de qué se trata”.
¿Qué son para usted los libros, qué significan en su vida”
“Carl Sagan dijo: los libros son unos de los pocos elementos que trascienden la barrera del tiempo y aseguraba, que de lejos, el libro era uno de los mejores inventos de la humanidad” con ese pensamiento me quedo”.
“Quiero invitar a la gente a que deje de ver los libros como algo aburrido o que son solamente para los llamados nerds o intelectuales. El libro es para todos: niños, jóvenes, adultos, es para todos y están ahí para aprender en ellos; y con seguridad es uno de los mejores regalos que uno puede recibir y dar”.
¿Qué destino debería tener un libro ya leído?
Muchas manos más, muchas lecturas más…