Escribió el gran Jean Francois Revel: "La ideología es un mecanismo para rechazar los hechos cuando estos amenazan con forzar la reexaminación del preciado dogma. Y la ideología inventa hechos cuando sea necesario para la supervivencia del dogma". Esto se evidenció con el comunismo, que junto con el nazismo hacen el dúo dinámico de la masacre industrializada.
Me sorprendió mucho ahora ver a los libertarios querer emular a los comunistas en su "negacionismo" de los hechos. María Fernanda Cabal, Alberto Bernal, John Milton Rodríguez, Rafael Nieto Loaiza y un sinnúmero más que cuando los veo escribir no veo la honestidad e hidalguía de un Raymond Aron, sino la rabia, fanatismo y canallería de un Diosdado Cabello.
Partamos de un principio: para un libertario de verdad, de la escuela de Karl Popper, una sola evidencia en contra de mi teoría es más que suficiente para echar toda mi teoría a la basura. Y si solo busco evidencia que confirme mi posición y no evidencia de lo contrario, ya dejé de ser un libertario y pasé al club de los fanáticos, como los comunistas.
Y todavía más importante: que tenga evidencia de algo no quiere decir que no exista evidencia de lo contrario. Que toda mi vida haya visto solo loros verdes no quiere decir que no existan loros amarillos en algún lugar del mundo, no puedo usar mi evidencia como prueba de que algo distinto no pueda existir.
Acá tres muestras claras de lo ideologizados que andan los libertarios:
1. La cuarentena la impone el gobierno y es la obligación de cumplir con la cuarentena lo que afecta la economía: De esto la evidencia que ellos tienen son los decretos del gobierno y las multas. Se les olvida revisar la evidencia de lo contrario: no es solo el gobierno el que impone la cuarentena, en todos los países, aún antes del aviso de cuarentena, los ciudadanos de manera voluntaria empezaron a cerrar sus negocios sin presión del gobierno. Y no solo esto: aunque el gobierno levante la cuarentena habrá muchos negocios donde los ciudadanos no querrán volver por miedo al contagio, o negocios donde los mismos dueños optarán por no abrir así tengan permiso del gobierno, o habrá padres de familia que no querrán que sus hijos vayan al colegio, y hasta habrá municipios donde las alcaldías prohibirán el acceso de personas con apoyo de las comunidades locales.
2. La tasa de letalidad es más baja de lo que quieren promover los medios: Y en esto pueden estar en lo cierto, e igual tienen que revisar la evidencia de lo contrario. Las tasas de contagio y letalidad varían de un país a otro, incluso de un barrio a otro, y esto es debido al efecto Hughes, o maldición de la dimensión. La tasa de letalidad depende de demasiadas variables: edad de los fallecidos, enfermedades previas, lugar donde vive, ingresos económicos, sistema de salud del país, tiempo en cuidados intensivos, acceso a respiradores en el país, cantidad de personas con las que vivió el fallecido, criterio de los gobiernos para decidir si murió por COVID-19 o no, etc., etc., etc. Cuando usted tiene tantas variables usar un resultado estadístico significativo de este caldo es imposible, hay tanta dispersión de un país a otro, de una ciudad a otra, de un barrio a otro, que decir que la tasa de letalidad es baja porque a X o Y país o ciudad le dio un resultado bajo es, además de una total ignorancia de la estadística, algo irresponsable.
3. La cuarentena irracional está matando la economía: Acá me sorprende leer esto de un libertario. En serio esperaba este tipo de comentarios fanáticos, sin evidencias, de un Nicolas Maduro. No es la cuarentena la que cerró la economía, es el virus. Aún en la anterior pandemia, la gripe española, decían que todo era una conspiración para matar la economía. Hay que dejar algo claro: pandemias siempre ha habido y habrán, unas más letales que otras. Y la manera de protegerse de las pandemias seguirá siendo por los próximos 1000 años de la misma manera que ha sido desde que se fundaron las religiones hace más de 6000 años: cuarentenas y distanciamientos. Por más que quieran los libertarios no pueden empujar a toda la gente a las malas (como hacían sus "enemigos" los comunistas) a que salga a trabajar y a producir. La gente que pueda no va salir de su casa ni va entrar a un restaurante así el señor Alberto Bernal se dedique a insultarlos por Twitter. Por eso los que no pueden, los más pobres, latinos y afroamericanos, son los más infectados en Nueva York, y así será en Colombia, los más pobres pagarán con sus vidas mantener arriba la economía de sus propios hogares.
A pesar de este artículo escrito por un libertario, la respuesta que seguro voy a tener de parte de estos "libertarios" es que van a buscar más evidencia a favor de sus opiniones, se burlarán de mi posición, y se mantendrán ciegos ante la evidencia de lo contrario, como se mantuvieron los comunistas ciegos ante su evidente fracaso.
No se puede ser libertario si uno maneja agendas a favor de grandes corporaciones como la banca, ideologías políticas como el uribismo, o cualquier otro sistema que acomode la realidad a sus teorías y no se tomen el trabajo de ver la evidencia de lo contrario.
Espero me hayan entendido, cuando no quieren ver o entender la evidencia en contra de sus posiciones solo puedo decirles: bienvenidos al club del comunismo fanático.
Posdata. Lo de Suecia, sacrificar vidas teniendo los medios para salvarlas desde un principio como hizo Nueva Zelanda o Corea, es inmoral. Y me sorprende que estos "libertarios", muchos de ellos católicos o cristianos, desconozcan incluso los preceptos de su fe con tal de acomodar los hechos a favor de su ideología. Dijo Jesús: "Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas". El que tenga oídos para oír...