La Corte Suprema de Justicia condenó a 60 años al ex congresista en el 2010 por ser el autor intelectual de la masacre que cometieron los paramilitares el 16 de octubre del 2000, en la que asesinaron a 15 campesinos en Macayepo, Sucre, y el homicidio de una testigo electoral del municipio de San Onofre, en 1997. También por concierto para delinquir con los ‘paras’ y peculado. Claramente el excongresista fue uno de los protagonistas del horror que vivieron los Montes de María durante los veinte años del control paramilitar del territorio.
La Jurisdicción Especial lo aceptó sobre la base de un compromiso con la verdad sobre la relación de la política regional con el paramilitarismo, apoyos a candidaturas, atentados a funcionarios públicos, relaciones con las autoridades locales y con las Fuerzas Militares. Sus aportes son claves para entender la manera de operar el Bloque Norte de las Autodefensas comandado por Salvatore Mancuso, a quien la JEP no ha querido aceptar.
Esta es la resolución: