LA BATALLA POR LOS ÍDOLOS PAISAS
Mientras el alcalde Federico Gutiérrez libra cada que puede una batalla contra el mito de Pablo Escobar que se regó por todo el mundo y no se puede atajar con medidas parroquiales, el gobernador Luis Pérez reconoce al nuevo mito musical de la comarca, Maluma, quien canta pegajosas canciones para la juventud que harían horrorizar a las más distinguidas matronas paisas de antaño. Por supuesto, en las comunas donde adoran a Pablo Escobar no entienden a Federico y en El Poblado creen que el homenaje del gobernador a Maluma es pura corronchería.
POPAYÁN PELEA TODAVÍA POR UNA PROCESIÓN
La actitud del alcalde de Popayán, Cristian Gómez, del arzobispo Marín y del inefable señor Velasco, que manejan las procesiones de Popayán para tratar de impedir que se realice la procesión del Lunes Santo, fracasó en su esfuerzo de no permitirla y de pretender desbaratarla con el Esmad. Ante la presión ejercida por los medios y las redes, la petición pública del Concejo Municipal y la razón irrefutable de que dejar desfilar esa procesión ni violentaba el esquema que la Unesco elevó a categoría universal, ni atentaba contra el racismo clasista popayanejo porque las sahumeadoras van a ser negras de Puerto Tejada y el cordón de seguridad lo brindará la Guardia Indígena, el alcalde terminó autorizándola.
NO SE APRENDE DE LOS ERRORES
Cuando se presentó el terremoto de Armenia en 1999 y el país tenía los calzones abajo, pasó casi todo lo que está sucediendo en Mocoa, imprevision, saqueos, hambruna, falta de techo etc. Para corregirlo se montó con rapidez e inteligencia el Forec y se puso a la ciudad bajo una jefatura de mando que resolvió con sentido común las consecuencias de lo que una catástrofe de esa naturaleza genera. En Mocoa, desde el primer momento se ha evidenciado una protuberante falta de coordinación, una ausencia de mando y aun cuando el presidente ha ido tres veces, las respuestas han sido a los bandazos.