LA PROHIBICIÓN DEL GLUCANTIME DEBERÍA
SER JUZGADA POR LA JEP
Hay un hecho de la guerra o conflicto según los uribistas, que el presidente Santos negoció,barata o cara,su terminación en La Habana y no fue incluído en el mamotreto.El de que los ejércitos de Colombia tuvieron prohibido como medicamento restringido durante todos los años que duró el enfrentamiento el medicamento Glucantime, con el cual se combate la leshmaniasis. En un acto inhumano que pretendía servir de herramienta para enfermar a los guerrilleros militantes en las selvas a alguien se le ocurrió restringir la venta de ese medicamento y miles y miles de combatientes y de civiles vieron lejano el día de su curación. Esta clarísima violación de los derechos humanos,que muchas veces columnistas como yo denunciamos, jamás ha sido presentada como tal ante la JEP y no parece que lo será. La crueldad es pareja de la guerra, así ella no se acepte que existió. Pero como por estos días se ha conocido un informe del aumento de la enfermedad en toda la cuenca del Cauca inmediatamente antes y después de la presa de Hidroituango ,donde la guerra campeó,y todos se lo atribuyen a esa política despiadada con el Glucantime,en vez de salir solo a defender la JEP, hay que exigirle que investigue este asunto.
UN PAÍS DE MASCOTAS
El 58 % de los colombianos encuestados en las 4 grandes ciudades del país por Cifras y Conceptos reconocieron tener al menos una mascota en sus hogares. Solo una cuarta parte de esos hogares tienen como mascota a un gato. Los perros llevan ventaja. Y en Cali los superan por más del doble. Aunque no dividieron entre los que tienen hijos y los que solo tienen mascotas, cada vez, según esa misma y curiosa encuesta, el número de hogares que tienen un perro, un gato o unos pájaros es casi igual a los que tienen hijos en esas 4 ciudades, Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla. Todo ello conlleva un mercado especializado, unos caprichos que satisfacer y una visión del país que deberían tener muy pero muy en cuenta los que quieran gobernarnos de ahora en adelante.
DOS NUEVOS ENSAYOS SOBRE EL ASESINATO DE GAITÁN
En ocasión del nuevo aniversario del asesinato del máximo caudillo que ha tenido Colombia en toda su historia, Jorge Eliécer Gaitán, el 9 de abril de 1948, han sido develados dos nuevos ensayos sobre las motivaciones y actores de este crimen que 70 años después sigue intrigando. Uno realizado por el historiador Hernando Olano García y publicado en su blog ese día y el otro, el que Gloria Gaitán y un grupo crecido y respetable de investigadores entregaron a la Comisión de la Verdad. En uno se acoge nuevamente la tesis de que a Gaitán no lo mató Roa Sierra sino el policía Potes, oriundo de Roldanillo y en el otro que los autores intelectuales del delito fueron los líderes oligarcas de aquel momento encabezados por el propio presidente Mariano Ospina Pérez. Habrá que leerlos en detalle y develar más de 70 años después tantas verdades que no se contaron o fueron tergiversadas.