LOS IMPUESTOS AGREDEN PERO
EL DESPILFARRO ENARDECE
Mientras más se acerca el día en que el arrodillado y enmerlado Congreso Nacional apruebe a pupitrazo la RTO (reforma tributaria oligarca) más crece el enardecimiento de quienes sienten que los impuestos con que los van a agredir son, a más de injustos, fruto de una persecución miserable contra los asalariados y jubilados de Colombia. El impuesto adicional a las motos, a las pensiones, a los salarios mayores a 2 mínimos, el IVA al 19 %, y toda una gama de tributos nuevos, hace pensar que como en la época de la Revolución Francesa, al pueblo se le castiga para conseguir que los oligarcas en el poder tengan con qué seguir gozando.
CON LOS SOBRECOSTOS EN REFICAR
NO HABRÍA RTO
La cifra que dio el contralor general de la República, de que Reficar que iba a costar 4 000 millones de dólares terminó costando 8 500 millones hace pensar que donde no se hubiese presentado ese despilfarro (ocurrido en los últimos seis años) no habría habido necesidad de decretar la RTO (reforma tributaria oligarca). Con haberse ahorrado el gasto de 4 500 millones de dólares en la refinería, la tal reforma para conseguir 20 billones no se hubiese presentado. De la misma manera, como este es el gobierno del despilfarro, si la RTO tuviese siquiera un capítulo para disminuir el gasto del gobierno, otro habría sido el cantar. Pero No. Todo quieren solucionarlo con más impuestos y sin ahorrar nada.
SOLO BASTA ANULAR UN ARTICULITO
Los defensores de la paz de Santos, que terminó siendo de todos los colombianos menos de Uribe y su combo, andan desesperados confiando en que la Corte Constitucional les apruebe, a su estilo santafereño, el fast track para poder agenciar velozmente la implementación de la paz y las reformas constitucionales. El asunto, empero, es más sencillo de lo que creen. Bastaría que la Corte determine que el artículo 5 del Acto Legislativo, donde se exige refrendación popular para el cambio constitucional que allí se hizo, se declare inconstitucional y que todos los otros 4 artículos, donde están contenidos los poderes habilitantes para presidente y Congreso, queden vigentes.