Guarín era un verdadero ídolo, lo tenía todo: talento, disciplina y un carisma que le falta a muchos de los futbolistas colombianos. Asimismo, era un hombre familiar, tenía un sólido matrimonio con la bella venezolana Andreina Fiallo con quien tenía dos hijos. No habían escándalos que los involucraran, eran una relación de más de 15 años envidiada por muchos y respetada por la prensa. Hace 6 años todo se vino abajo, la imagen ideal de la familia Guarín se vino abajo cuando su matrimonio se vio truncado por una infidelidad con la exprotagonista de Novela, Sara Uribe. En Colombia no se hablaba de otra cosa, la aventura le podría costar su familia al jugador.
Sin embargo, la empresaria e influenciar lo perdonó y retomaron la relación. No pasó mucho para que oficializaran en el 2017 la ruptura definitiva. Guarín se mudó a China, prefirió una tonelada de dinero con el que aseguró su futuro que seguir en la elite del fútbol mundial defendiendo los colores de un equipo tan importante como el Inter de Millan. No se fue solo, lo acompañó Sara Uribe lo que desató una oleada de críticas convirtiéndose en la pareja más polémica de la farándula colombiana. En los medios ya no se hablaba de la exitosa carrera de Guarín sino de su infidelidad.
Aunque Uribe y Guarín tuvieron un hijo, después de casi 5 años y antes de llegar al altar rompieron su compromiso. El país todavía no le perdona a Guarín y Uribe su romance prohibido. El futbolista protagonizó recientemente un escándalo por violencia intrafamiliar, al parecer tuvo un riña con unos miembros de su familia materna. A esto se le suma, las cuatros demandas que interpuesto Andreina Fiallo en su contra en los últimos dos años. Algunos procesos judiciales terminaron archivados pero uno de ellos se solucionó por acuerdo entre las partes.
Ahora Guarín se ha enamorado de una caballista y veterinaria que no oculta su admiración por el expresidente Alvaro Uribe: