La serie más vista el pasado verano en el mundo fue Hotel, la Quinta temporada de American Horror Story. Una de las razones fue el debut como actriz de Lady Gaga. La artista, nacida en Manhatan hace 29 años, se ha convertido en un ícono de la vanguardia musical y, también sexual. Sus vestidos extravagantes y las coreografías que despliegan sus canciones, la hicieron un ídolo dentro de la población gay. A ella no le importa si su amor de turno es una chica (“Me gustan los chochitos” dijo alguna vez en una entrevista”) o un filósofo de fama universal como el esloveno Slavoj Zizek, con quien estuvo comprometida. Su papel como la vampiresa despiadada dueña de un hotel construido en los años 20 en Beverly Hills, terminó convertida en la mujer más deseada por otra mujeres.
Y es que definitivamente existe una revolución dentro del entretenimiento en donde los temas de amor entre mujeres se han tomado la pantalla chica. La premiada Orange the new black cuenta la historia de una que se enamoró de una narcotraficante y por culpa de su idilio va a parar a la cárcel. Las lesbis también se están apoderando poco a poco de Glee, Gotham, Orphan Black y Black Sails.
La pantalla grande tampoco se queda atrás. Este año llegarán a Colombia cuatro películas que dieron mucho de qué hablar en la carrera para los Oscar. Como injusta se ha calificado la ninguniada que le pegaron a Carol, la última película de Todd Haynes que cuenta la relación entre una cuarentona infeliz con su matrimonio y una fotógrafa veinte años menor que ella. Los que la han visto afirman que fue, sin duda, la mejor película del año. Sus protagonistas, Cate Banchet y Rooney Mara, son serias aspirantes al Oscar, de lograrlo sería la tercera vez que se le otorgaría la estatuilla a una actriz que interpretara a una lesbiana después de que lo consiguieran Charlize Theron en Monster y Virginia Woolf en Las horas.
Completamente relegadas en las lucha por los premios de la Academia fue Freeheld, la historia de una luchadora de los derechos LGTB, interpretada por Julianne Moore y su historia de amor con una fabulosa Ellen Page, actriz que desde hace más de 10 años exhibe orgullosa su condición de lesbiana.Grandma, la historia del rompimiento de una poeta con su novia y se una a una aventura con su nieta, se estrenó en Sundance con gran repercusión y se espera su estreno en Colombia a mediados de mayo.
En Colombia, aunque es mucho más complicado salir del closet, actrices como Patricia Castañeda o Carla Giraldo han dicho de frente que son bisexuales y Alejandra Borrero nunca ha tenido problemas con su condición sexual. Las últimas lesbianas que han salido en televisión orgullosas de su relación son Milena y Karen participantes del reallity Asia Express quienes, cada vez que pueden, le dicen a las cámaras que ellas quieren desmiticar que las lesbianas son machorras y que se ven feas juntas, que se golpean y que son exhibicionistas, estigmas que cargan las parejas del mismo sexo en un país que aún carga la cruz de la homofobia.