Las palabras del Papa Francisco al Congreso de los Estados Unidos en el que implícitamente criticó las peleas políticas internas llamando a la unidad alrededor del propósitos mayores –“tenemos unas responsabilidades comunes”, tuvieron un primer efecto político: la renuncia del republicano John Boeher a la curul en cámara. Boeher, representante por el estado de Ohio ocupaba el escaño desde el 2010 había liderado la oposición al gobierno de Barack Obama y las palabras del Papa lo hicieron reflexionar, según dicen compañeros de Boeher quien aún no ha dado una versión oficial.
El Papa Francisco fue insistente en su llamado a evitar la polarización y la radicalización ideológica y el compromiso que deben tener los políticos para encontrar soluciones y respuestas en favor del bienestar de sus ciudadanos. Boehner ya había manifestado antes su desacuerdo con algunas ideas de las facciones de ultraderecha de su partido, sin embargo prefirió no continuar desgastándose en estériles debates internos y hacerse a un lado a finales de octubre una vez concluya tareas legislativas en las que estaba comprometida.
John Boehner es católico y fue formado escolarmente por los jesuitas. Antes de informar en una reunión cerrada sobre su renuncia leyó una oración de Francisco de Asis, santo que inspiró al cardenal Jorge Mario Bergolio para nombrar su pontificado.
Este fue el discurso que confrontó al representante Boehner y lo llevó a renunciar
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