La colección cubre la sala entera. Jaime Andrés Monsalve está contento, un carpintero acaba de entregarle una nueva versión de su discoteca. Son 2.405 vinilos de 12 pulgadas, 563 sencillos de 7 pulgadas, 123 de 78 revoluciones, 94 casettes y 4.814 CD's.
-¿Cuánto vale lo que tienes?- Le digo mientras miro con cara de hampón un álbum triple y único del concierto de Metallica en Bogotá en agosto del 2014
-Hombre es que es muy relativo, si yo me muero mañana mi mamá viene desde Manizales y agarra todo esto lo empaca en bolsas de basura y se lo regala al primero que pase. Si yo decido vender graneadito sería otra cosa- Los 25 años en Bogotá no le han quitado el acento manizalita
Jaime Andrés tiene 46 años y no se le notan. Pareciera que hubiera pactado con el diablo que nunca una arruga se le estampille en la cara y, además, conseguir los discos más imposibles a los precios más ridículos. Así pudo tener el primer disco de jazz que se grabó en la historia, por allá en 1913 cuando este ritmo se escribía Jas. De la misma forma que pudo conseguir un disco de Efraín Orozco, músico de Cajibío completamente olvidado en el país, en una visita en Buenos Aires. A veces el diablo le falla y por eso la obsesión lo obliga a dar sin remordimientos 500 mil pesos por un disco de Los electrónicos, una banda de los setenta que hacía versiones de canciones de música colombiana tan rara como esto:
El jefe musical de la Radio Nacional de Colombia tiene una modestia a prueba de conocimientos. En la mañana del mismo día en el que nos dejó entrar a su casa en Chapinero la cancillería le había dado una placa por los 25 años de trayectoria al servicio del periodismo cultural. Él no nos contó, yo, de abusivo, abrí la pequeña cajita que estaba revuelta en la mesa del comedor, entre vinilos y funkos de Breaking Bad, y la vi. Jaime Andrés, rojo de la vergüenza, tuvo que contarnos los detalles de la ceremonia. Director de La Onda Sonora, comunicador social de la Javeriana, amante del Tango y autor de una biografía sobre Gardel, Jaime Andrés Monsalve se explaya en esta entrevista sobre las tribulaciones y placeres que vive un coleccionista de discos en la era de Spotify:
+Esta nota está inspirada en El día de mi suerte, capitulo de Melómanos, el último libro de Jacobo Celnik publicado por editorial Aguilar