Las abuelas del distrito de Aguablanca en Cali serán las encargadas de velar por el bienestar de la comunidad en este sector caracterizado por sus altos niveles de violencia que en muchos casos involucran a los más jóvenes. Al menos, así lo busca una iniciativa concebida y ejecutada por Vertigo Graffiti en compañía de la organización Corpovisionarios, la cual consiste en pegar fotografías de alto formato en varios espacios del barrio Orquídeas, dónde se han cometido actos de violencia.
Las protagonistas de las imágenes del fotógrafo Nicolás Fernández, fueron abuelas habitantes de Aguablanca, quienes sostienen en las manos sus propios mensajes para los jóvenes de la comunidad. El objetivo de esta idea es buscar que los jóvenes se vean como iguales y no como enemigos pertenecientes a diferentes pandillas basándose en la creencia de que la abuela educa y reprende con afecto, siempre desde el amor.
Entre la comunidad se repartieron más de 200 afiches con las fotografías de las abuelas para que ellos mismos identificaran espacios de violencia o riesgo y los pegaran creando sus propios espacios de reflexión y seguridad.
La intervención además fue muy amigable con el medio ambiente. El papel utilizado está hecho 100% con fibra de caña de azúcar sin blanqueadores y que no compite con la producción de alimentos ni la utilización de suelos. Además, se utilizaron tintas látex que no producen emisiones perjudiciales para la capa de ozono ni durante la impresión ni durante el tiempo de exposición dado que no contiene contaminantes atmosféricos.