El 19 de abril de 2015 se realizaron las consultas internas de partidos políticos con apoyo de la registraduría que obraron de primera ronda de las elecciones regionales que sucedieron. Participaron de esa jornada el Centro Democrático, el Partido Liberal Colombiano, el Partido Conservador Colombiano y el Polo Democrático Alternativo. Éste último, que elegía su IV Congreso Nacional, aportó la mayor parte de la participación en esas elecciones logrando 417 mil votos en todo el territorio nacional. El lunar más visible de esa importante votación fue el registro de más de 63 mil votos nulos y 26 mil no marcados, relacionados, probablemente, con la complejidad del tarjetón elaborado.
Entonces, hubo una gran celebración por el contraste de los resultados obtenidos que, comparados con los del III Congreso Nacional del Polo Democrático en 2012, simbolizaban la conclusión de un periodo de reflujo, causado por la decisión mayoritaria de la colectividad de mantener su apoyo político al cuestionado gobierno de Samuel Moreno, hasta el día de su suspensión por parte de la Procuraduría General de la Nación. La historia, sin embargo, no parece ser tan bonita.
Las campañas internas estuvieron marcadas por una fuerte polarización entre el sector encabezado por el Senador Jorge Enrique Robledo y el Movimiento Obrero Independiente y Revolucionario - MOIR, y la presidente del Partido, excandidata presidencial y actual aspirante a la Alcaldía de Bogotá, con acusaciones mutuas de matoneo y rumores de que Clara haría lo que fuera para ganar la elección. Independientemente de los resultados conjuntos, las diferencias entre las votaciones de las listas encabezadas por cada uno, serían cruciales en la resolución del conflicto y determinarían la posición dominante. El resultado final, por una leve mayoría, dio como ganadora de la jornada electoral a López sobre Robledo, quien es el senador más votado de esa colectividad y el segundo más votado en todo el país.
La recepción individual de los resultados fue prudente. En público se limitaron a la emisión colectiva de una declaración que calificó las elecciones como un éxito y afirmaron la disposición mutua de diálogo para subsanar las diferencias. Sin embargo, los análisis minuciosos de los resultados arrojaron conclusiones tensionantes: Los resultados en el Valle del Cauca fueron inesperados, contradictorios con las votaciones de Senado y Camara; pero los resultados en Cordoba, Sucre y La Guajira fueron asombrosos, considerando que en los primeros 50 renglones de la lista que encabezaba Clara López no figuraba ningún oriundo de esos departamentos.
Es así como en 6 municipios de Cordoba (Chinú, Cotorra (Bongo), Pueblo Nuevo, Purísima, Sahagún y San Bernando del Viento), en otros 5 municipios de Sucre (Guarandá, Majagual, San Juan de Betulia, San Marcos y Sucre), en 2 de La Guajira (Dibulla y San Juan del Cesar) y uno de Magdalena (Sevilla o Zona Bananera) la presidente del Polo logró para el IV Congreso Nacional de su partido votaciones que ni siquiera pudo alcanzar en la elección del 25 de mayo de 2014 y el partido vio multiplicados por diez en su consulta interna los resultados obtenidos para el Senado y Cámara.
La crecida más sorprendente ocurre en el municipio de San Bernando del Viento, en Cordoba, donde el Polo logró 88 votos al Senado, 65 a la Cámara de Representantes, 408 a la Presidencia y unos generosos 1641 a su IV Congreso Nacional, de los cuales 1482 serían para la lista encabezada por la doctora Clara López y el Senador Iván Cepeda. Así mismo ocurre en el municipio de Sucre (Sucre), donde el Polo logra 74 votos a la Cámara, 95 al Senado, 162 a la Presidencia y en la consulta interna se proyecta a 634 votos, de los cuales 527 fueron para la lista de la ex Candidata presidencial. Comenzó a circular el rumor entre militantes locales del Polo de que Clara López había recibido ayuda del representante Yahir Acuña, que ha sido sindicado de compra de votos y relaciones con grupos paramilitares en la región.
La inesperada victoria de la lista No. 10 en el Valle del Cauca, que logró 12 mil votos sobre los 8 mil del senador Alexander López (el barón electoral de la región) y los más de 7 mil alcanzados por Robledo, también puso a circular un rumor que parecía confirmarse en los meses venideros: Dilian Francisca Toro habría impulsado la lista de Clara si se retiraba el aval que, para competir por la Gobernación, la dirección departamental del Polo había otorgado al ex Senador Mauricio Ospina, quien aspiraba a ser co-avalado por El Partido Alianza Verde. Así sucedió. Ospina es candidato por los Verdes, mientras el Polo impulsa la figura de Alejandro Ocampo, un instructor de natación.
Una fuente ‘Off the record’ dentro del grupo del Senador Robledo, confirmó que tuvo lugar una reunión entre el parlamentario, el Secretario General del Polo, Gustavo Triana Suárez, el senador Alexander López, el ex representante Wilson Borja y el profesor Rodolfo Arango, donde Robledo y Triana afirmaron estar enterados de esos resultados que parecían sorpresivos, que podrían consistir en un fraude electoral y que lo mejor en el momento era hablar con Clara, negociar y no dar publicidad a las sospechas que pondrían en entredicho la imagen del partido y sus opciones de éxito en las elecciones regionales.
Constantes han sido los reclamos a la ex Alcaldesa (D) de Bogotá por su relación con la administración de Samuel Moreno Rojas, acusado por el desfalco de la ciudad conocido como “Carrusel de la Contratación”, administración en la cual la doctora Clara López fue Secretaria de Gobierno, y al Senador Jorge Robledo y sus amigos por su silencio cómplice mientras el saqueo ocurría en sus narices. Si bien estos resultados electorales y su comparación, por sí solos, no arrojan indicios contundentes de una conducta delictual, queda la duda respecto a la razón de estos resultados tan atípicos para el Polo y para Clara López, y de la actitud de sus copartidarios se desprende una posibilidad más desagradable: su tolerancia con la corrupción.