Los problemas que afectan a gran parte de la población son ocasionados por quienes gobiernan y sus títeres en ministerios, congreso, y entidades con funcionarios de sangre azul.
La risita burlona tras los micrófonos se utiliza para mamarle gallo a quienes protestan y reclaman; actitud que humilla y produce indignación.
Los vehículos que los transportan, propiedad del pueblo, con vidrios polarizados, costosos, protegidos por guardaespaldas, se ven como en las películas de grandes hampones que se enfrentan a las autoridades para defender sus capitales ilícitos.
El pueblo elige a quienes nunca han sufrido hambre, siempre han tenido techo, vehículos, colegios de alta alcurnia, no prestan servicio militar, son dueños de empresas y propiedades por montones, no se mueren porque tienen dinero para ir a las mejores clínicas nacionales e internacionales, no han sido maestros de colegios públicos y universidades públicas, ni choferes, arroceros, cafeteros, ni campesinos; no compran los zapatos en las tiendas de todo a cinco mil, sino en tiendas de marca, mandan desde chiquitos a personas mayores, en ocasiones con malas palabras y mirándolas por debajo del hombro, y muchas diferencias que usted amigo lector puede agregar. ¿Cuántos hay en las cárceles?, ¿existen excepciones?
La diferencia social es tan grande que nos obliga a pensar que los dineros del estado, que el pueblo paga en impuestos, son tomados como si fueran de propiedad de los elegidos.
El cuatro por mil creado para cubrir las quiebras de los bancos, cuyos dueños son personas particulares entre ellas políticos, lo paga el pueblo que reclama y no es escuchado. Las empresas que producen empleo en la industria y comercio de pequeños inversionistas se quiebran, y todos pierden, porque al gobierno no le importa el desempleo que eso produce y que es la solución para las clases trabajadoras. Las entidades financieras publican ganancias astronómicas ganadas con intereses, comisiones, y manejan ese impuesto que debe ser del pueblo y puede servir para solucionar los problemas sociales que hoy existen. Si hacemos un análisis juicioso, podemos concluir la razón por la cual los problemas sociales no se arreglan.
Para cerrar, las redes sociales se llenaron de mensajes que alertan sobre un gran paro de transportadores que dejará a toda la población desprotegida, pero a los que nos gobiernan no les importa porque tienen aviones y helicópteros para ir a comprar a cualquier país vecino.