Una vez finalizados los comicios electorales del domingo, que proclamaron al candidato Iván Duque a la presidencia de Colombia, las redes sociales se inundaron con los tradicionales mensajes de odio de un bando y otro. Los análisis políticos por parte de múltiples periodistas tampoco se hicieron esperar.
Todo empezó cuando, el día lunes, Jon Lee Anderson —afamado periodista estadounidense que escribe para el New Yorker, usualmente sobre política internacional— escribió (en español, idioma que domina por haber vivido mucho tiempo en su niñez en Sudamérica) por Twitter, con el estilo cáustico, directo y marcadamente partidista que lo caracteriza: “El Hijo de Mister Motosierra gana en Colombia: Alvaro Uribe wins in Colombia: Iván Duque wins Colombia presidential election”.
El Hijo de Mister Motosierra gana en Colombia: Alvaro Uribe wins in Colombia: Iván Duque wins Colombia presidential election https://t.co/kDRQv3YkmS
— Jon Lee Anderson (@jonleeanderson) June 17, 2018
Docenas de partidarios de Duque reaccionaron con insultos hacia el periodista estadounidense, pero la respuesta más llamativa fue la de Manuel Teodoro, a quen muchos reconocerán por ser el presentador del programa Séptimo Día.
Teodoro, también por Twitter y en inglés, le exigió respeto a Anderson: “Muestra algo de respeto por el voto de 10 millones de colombianos. Demuestra decencia. Demuestra algo de clase. ¿Cómo crees que un comentario como el tuyo le sienta a la mayoría de los colombianos que tienen esperanza?”.
Show some respect for the vote of over 10 million Colombians. Show some decency. Show some class. How do you think a comment like this feels to the majority of Colombians who have hope?
— Manuel Teodoro (@Manuel_Teodoro) June 18, 2018
La respuesta de Anderson, quien acostumbra a responderle en tono vehemente a aquellos usuarios que lo increpan, no se hizo esperar: “¿La verdad duele? También duelen las motosierras. Ayer, un uribista me dijo que me preparara para tomar de mi propia medicina: Taladrín, de taladro. Tu gente es tan decente y tiene tanta clase ¿cierto?”.
Truth hurts? So do chainsaws. Yesterday, some uribista told me to get ready to take my medicine - Taladrin, as in taladro. Your crowd is so decent and full of class, isn’t it? https://t.co/N7NtIpexks
— Jon Lee Anderson (@jonleeanderson) June 18, 2018
En una seguidilla de tuits, Anderson se despachó contra Uribe, vinculando en su cuenta de Twitter múltiples notas de prensa sobre la relación entre los paramilitares y el expresidente antioqueño. Fue cuando Anderson comparó a los uribistas con los partidarios de Trump, y los calificó de “miedosos, racistas, incultos, agresivos y muy muy muy tontos” (sic), que Teodoro procedió a amenazar a Anderson: “Mantente alejados de nuestra política interna si sabes qué es lo que te conviene. Muchos aquí estamos esperando ver tu trasero comunista aquí en Colombia. Ven pronto”.
Se le tiene el pantallazo. pic.twitter.com/LIl79cdSFx
— Juan Cárdenas (@tigrillodelsur) 18 de junio de 2018
Oye Manuel, tu que andas en ? siempre: Me estas amenazando, acaso? https://t.co/rzYFG9Bbrp
— Jon Lee Anderson (@jonleeanderson) June 18, 2018
El tuit, que fue borrado, fue recuperado por el usuario @tigrillodelsur, quien le tomó un pantallazo.
Felipe Restrepo Pombo, periodista y director de la revista Gatopardo, calificó de amenaza las palabras de Teodoro, y mediante Twitter le manifestó a la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) esta situación. Ante esto, Teodoro continuó con sus amenazas “La única sanción será para ti (se refiere a Restrepo) por ser tan sapo”.
El periodista @Manuel_Teodoro amenaza públicamente a @jonleeanderson.
¿Habrá alguna sanción por esta intimidación, qué dicen los medios donde trabaja al señor Teodoro?@FLIP_org @article19org @gomezdugand @tigrillodelsur @edpazsoldan @SalcedoRamos https://t.co/1xX7lWuieb— FelipeRestrepoPombo (@felres) June 18, 2018
Y sigue amenazando. pic.twitter.com/QqqNSpyvag
— Juan Cárdenas (@tigrillodelsur) June 18, 2018
Huelga decir que esta no es la primera vez que Teodoro y Anderson se enzarzan en una pelea dialéctica en Twitter, ya que en ocasiones previas han intercambiado argumentos (e insultos), cada uno desde su orilla ideológica. Así mismo, Teodoro ha demostrado ser un férreo defensor de Álvaro Uribe y de las políticas del Centro Democrático. Sin embargo, lo que sí resulta sorprendente —e inaceptable— es que en un país donde se registran cifras alarmantes de ataques a periodista (310 el año pasado, según cifras de la FLIP) que hacen que el ejercicio del periodismo sea una profesión del alto riesgo, sea precisamente un periodista quien amenaza (así sea velada o soterradamente) a otro colega.
Claramente, la libertad de prensa cobija (y así debe ser) que los periodistas puedan tener opiniones políticas personales que se transparenten o transpiren en el ejercicio de su profesión. Lo que la libertad de prensa nunca podrá cobijar son las intimidaciones, los llamados a la violencia y las mismísimas amenazas que a diario sufrimos los periodistas, y de las cuales, seguro, el mismo Teodoro habrá sido víctima en algún momento de su carrera.
