La revista Veja de Brasil, indicó que según declaraciones de Marcelo Odebretch a la Fiscalía de Brasil, en los años 90s, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) secuestraron a dos ejecutivos de Odebrecht y los tuvieron más de un mes secuestrados en la selva. La empresa apeló a un grupo estadounidense especializado en zonas de conflicto, que negoció la liberación de los rehenes y sugirió realizar un pago mensual a las FARC para evitar nuevos problemas de ese tipo. Los pagos habrían sido entre USD 50 000 y USD 100 000 mensuales, durante 20 años, y que denominados "impuesto guerrillero" por las FARC, por Odebretch eran calificados de "costo operativo" o "tributo territorial" en los balances de la empresa. Estos pagos eran hechos en dinero, directamente en los sitios de obras bajo amenaza.
Lo más probable es que el secuestro y posterior acuerdo económico con las FARC, hubiera ocurrido en algunas de las siguientes obras que BP Exploration Company contrató con Odebretch en los años 90s: en 1992, la ampliación de la capacidad de bombeo de las estaciones el Porvenir, Miraflores y Vasconia, en el departamento del Casanare, para la evacuación de la producción de los campos de Cusiana, Cupiagua y otros del Piedemonte Llanero; o en 1994, la construcción de la Estación de Bombeo de Caucasia, Antioquia, para ampliar la capacidad del Oleoducto Central, y el terminal marítimo que requería la Drummond en Santa Marta para la exportación de carbón.
Los otros proyectos, sobre los que podría haber pagado “tributo territorial” o “impuesto guerrillero”durante la década de los 90 son: en la construcción de la ferrovía La Loma-Santa Marta, entre La Loma-Cesar y el Puerto Drummond-Magdalena, ordenada por Ferrovías (1995); en la Línea Troncal del Gasoducto Sebastopol-Medellín para Transmetano (1996); en la construcción de la Central Termoemcali en Palmira, Valle, para Betchttel Overseas Corporation (1997); la construcción del Proyecto Hidroeléctrico Miel I en Norcasia, Caldas, para Isagén (1997); y el Complejo Carbonífero del Cerrejon en La Guajira para la International Colombia Resources Corporation (1999).
Todos estos proyectos se encuentran dentro de las zonas históricamente en control de las FARC, según el siguiente mapa elaborado por la Fundación Paz y reconciliación, "Mapa de los municipios donde mandan las FARC y el ELN hace treinta años":
