Los seres humanos siempre han buscado la inmortalidad; dominar a la eterna vencedora: la muerte.
Nadie quiere aceptar que nacer es empezar a morir. No se cuenta vida, cada minuto, se van contando los días que nos acercan a la muerte y para evitarla los seres de todos los tiempos han pensado en la eterna juventud. En muchas culturas se habla de la eternidad y como aun no se consigue la del cuerpo se ofrece la eternidad para el alma.
Pero para el cuerpo, se ha ofrecido la fuente de la eterna juventud y es por ello que son muchos los lugares señalados como el sitio donde se encuentra. En algunas de ellas era necesario ingerir un poco y se hacia el milagro, en otras era obligatorio sumergir el cuerpo en ella para que operara la acción.
Dice la historia que uno de los primeros que habló sobre el asunto fue el griego Heródoto, quien relata que hubo un encuentro entre «entre Ezana, rey de Etiopía, y emisarios del monarca persa Cambises II. La preocupación de los asiáticos era conocer la razón por la que los etíopes eran longevos y gozaban de una excelente salud y fortaleza, incluso a edades muy avanzadas» Cuenta entonces que el etíope condujo a los visitantes hasta una misteriosa fuente «en la que cualquier objeto se hundía sin remedio y que el contacto con sus aguas perfumaba y suavizaba la piel de quien la utilizara».
Pero al parecer será posible la inmortalidad según lo predijo Ray Kurzweil, un ex ingeniero de Google quien ha señalado que «en 8 años los humanos conseguiremos la inmortalidad». Según el señor Kurzweil, la creación de nanobots o minúsculos robots podrán revertir la edad pues tendrán la capacidad de reparar células y tejidos dañados que se deterioran con el envejecimiento del cuerpo lo que permitirá que seamos inmunes «al paso del tiempo, lo mismo que a las enfermedades y a la muerte».
El hombre asegura que es el poder de la tecnología que cada vez es más avanzada y poderosa lo que permitirá que la humanidad viva para siempre mediante lo que se ha denominado la singularidad, una teoría que dice que la Inteligencia Artificial, superará a la humana que producirá un gran impacto en la evolución de la especie —dicen—
También asegura el ex ingeniero Google, que el implante de computadoras en el cerebro humano mejorará los individuos y que no es que la maquinas se apoderen de la humanidad sino que «se creará una síntesis humano-máquina que ayudará a la especie a progresar».
Pero es que el señor Ray Kurzweil, no es un loquito con deseos de notoriedad. El hombre es un neoyorkino quien a los 14 años empezó a trabajar como programador y es licenciado en informática y literatura. En 1965 se hechó al bolsillo el primer premio de la Feria Internacional de Ciencias con un programa informático «capaz de imitar la música de grandes compositores».
Ahí no paran sus destrezas. Mientras estudiaba creó un programa informático que ayudaba a los estudiantes de secundaria a «elegir una universidad a la cual asistir».
A punto de graduarse fundó una compañía con la que desarrolló una tecnología que permitía a los ordenadores «leer texto impreso en cualquier tipo de letra normal y también creo otra empresa fundada por él genero el primer sistema de reconocimiento de voz»
El hombre es un futurólogo que había advertido que « el mejor jugador de ajedrez del mundo perdería ante una computadora en el año 2000» lo que efectivamente sucedió cuando la IA Deep Blue venció a el ajedrecista Kasparov. También anuncio que « extremidades exoesqueléticas permitirían que los discapacitados caminaran» hecho que ya ha sucedido.
Lo cierto es que la ciencia avanza, no a pasos agigantados, sino a brincos súper gigantes lo que tienen en expectativa a los más importantes científicos del mundo —que ni siquiera ellos saben a dónde iremos a parar— como especie con este sinnúmero de avances que hoy se están dando. Por lo pronto parece que la fuente de la eterna juventud está en los nanobots que vaya usted a saber que cosa son….
