La diputada colombiana Ángela Hernández, una de las principales defensoras de la familia en Colombia, denunció recientemente la campaña de acoso y censura orquestada por el lobby gay en Facebook.
Hernández, diputada por el departamento de Santander, publicó en su página de Facebook una captura de pantalla en la que se dan instrucciones precisas para una “denunciatón” contra sus publicaciones.
La campaña busca denunciar ante Facebook y eliminar tantas publicaciones como sean posibles del muro de la diputada.
En la imagen se puede ver a un sujeto identificado como Felipe Balaguera diciendo que “como veo que las denuncias contra la diputada Ángela Hernández surgieron efecto y le están eliminando contenido, se convoca a otra denunciatón del contenido de esta piroba. ¡Todos a denunciarle esa página!”.
En Colombia, “piroba” era originalmente un insulto relacionado a la prostitución. Si bien ese uso ya no es común, aún es considerado un insulto fuerte.
Para la diputada defensora de la familia, este esfuerzo de censura se debe a que “desean callarnos a como dé lugar”.
“Todo en mi vida se lo debo a Dios y al pueblo. Es el cariño y la confianza de ustedes la que ha hecho que está página sea nuestro punto de encuentro”, señaló en un post en su página de Facebook.
Como respuesta al ataque, Ángela Hernández alentó a “compartir la página”, pues “así contrarrestaremos el cierre que desean darnos”.
En declaraciones a ACI Prensa, Hernández explicó que debido a que muchos medios de comunicación en su país son "sesgados" y "manipulados", los defensores de la familia han recurrido a las redes sociales, donde han encontrado "un lugar donde podemos comunicar la verdad, donde podemos informar con objetividad, donde podemos denunciar las cosas que están ocurriendo".
"Nuestra página, gracias a Dios, ha tenido una buena receptividad", dijo, y señaló que precisamente por eso "se han organizado vasrios grupos del lobby LGTBI (lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersexuales)" para hacerles "'redadas', si se puede decir de alguna manera, para que todos a la misma hora, al mismo tiempo, se ponen de acuerdo para intentar bloquear o cerrar nuestras páginas, nuestras cuentas sociales".
"Esto con el fin de callarnos, de que no hablemos más, porque lo que estamos hablando no les gusta, porque la verdad que estamos revelando les incomoda", indicó.
Para la defensora de la familia, esto evidencia que quienes "más hablan de tolerancia, inclusión, respeto, libertad, son los más irrespetuosos, los que más atacan".
Hernández recordó que en diversas ocasiones colectivos homosexuales llegaron al exterior de su oficina "a atacarme, a insultarme con carteles".
"Se han metido hasta a la Asamblea del departamento a interrumpir las actuaciones propias de la Asamblea", señaló, y estos ataques se producen "con ese mismo odio, con esa misma rabia que hoy estamos viendo en las redes sociales".
A diferencia del lobby gay, señaló, "jamás yo he ido a sus organizaciones, a sus clubes, a sus discotecas ni a sus encuentros, a meterme ni a decirles absolutamente nada. Nosotros hemos sido profundamente respetuosos con todos los seres humanos".
Hernández subrayó además que "la homofobia no existe, pero la cristofobia existe y cada vez es más evidente".
A pesar de todo, destacó, "el odio no nos genera compromiso. La gente que nos odia, que nos maltrata, que nos ignora no nos genera nada. Solo pedirle a Dios que tenga misericordia de ellos".
"Lo que sí nos genera compromiso son los que nos aman, los que nos han dado su confianza, los que nos han pedido que representemos su voz. Ese amor nos motiva a continuar, pese al odio, a las amenazas, del lobby LGTBI y de parte del gobierno", aseguró.
