Un soplo de tranquilidad se alcanzó a sentir por cercanías a la Avenida de Las Américas (Bogotá) hace unos meses cuando El Capo III con sus 11,0 puntos –aproximados- de rating se ganaba el primer lugar como el programa más visto de Colombia. Todo parecía indicar que gracias a Pedro Pablo León Jaramillo la sequía de rating que desde hace dos años azota a RCN llegaba a su fin. Sin embargo, desde los lados de la Floresta se estrena La Voz Kids, que con sus 17,7 puntos de rating vino a sepultarle cualquier posibilidad inmediata de un mejor panorama al canal de las tres letras.
La Voz Kids es una versión infantil del formato The Voice, desarrollado originalmente en Holanda durante 2010 y realizado a nivel mundial en más de 50 países en los cuales ha tenido gran éxito. En Colombia sus dos temporadas previas han cautivado al público y a diferencia de lo que sucede con muchos otros realities o programas de concurso, el talento sí es la principal característica que necesitan los participantes, y al parecer ganarlo si sirve para potenciar carreras pues Miranda, ganadora de la primera versión, acaba de ser nominada a un Grammy Latino como 'Mejor Nuevo Artista' por su álbum “Alma”.
Estrenado el martes pasado, La Voz Kids arrasó con el rating, registrando así 17,7 puntos en prime time lo cual, en estos tiempos dónde el 40% de la audiencia nacional se ha trasladado a canales por cable, es toda una proeza -que RCN no logra desde Protagonistas de Nuestra Tele 2012- digna de celebración. La Voz Kids es una propuesta colorida y musical cuyo protagonista es la inocencia propia de los niños. Si usted aún no se ha dejado contagiar por este fenómeno de televisión, haga el ejercicio de navegar en Twitter cualquier día de semana en la noche para que se haga una idea de la acogida que ha tenido en el país; por lo menos la mitad de los temas de tendencia en la red social tienen relación con el mencionado programa. Es frecuente encontrar #MeErizoComoMaluma #PorLasTetasDeFannyLu #ParcheKids Miranda, Alejandro Palacio, Caracol o inclusive Carolina Cruz, -cuando una niña homónima de la presentadora cantó- todos ellos alusivos al programa.
Ha sido tal la fuerza de La Voz Kids, que levantó a Los Fugitivos al segundo lugar de la tv colombiana. La serie por sí sola no era capaz de superar a su enfrentado, El Capo III y ahora en sus últimos capítulos, le ganó una amplia ventaja. Pese a que recientemente ha tenido algunos éxitos como La Selección, al parecer el fuerte del Canal Caracol no son las historias, sino los programas de concurso o realities como por ejemplo el ya institucionalizado Desafío que cabalmente se realiza cada año desde 2004, Yo Me Llamo y más recientemente La Voz, los cuales logran picos elevados de rating que en los últimos años es muy raro obtener con una telenovela o serie.
¿Qué es lo que tiene La Voz Kids que es lo suficientemente atractivo para pegar al televidente frente a la pantalla? Esa es la pregunta que se hacen en Las Américas. Tal vez es un buen manejo del suspenso propio en la mecánica original del formato, puede ser la música o el carisma de los inocentes participantes, pero lo cierto es que el programa engancha. Juzgue usted mismo:
Lo que hizo Caracol fue apostarle a una idea extranjera y el resultado fue extraordinario. Pueden ser los astros, pero lo cierto es que cuando RCN intenta hacer lo mismo, sucede todo lo contrario. Claros ejemplos han sido Idol Colombia, Colombia Tiene Talento 2 o Mundos Opuestos que pasaron sin pena ni gloria por nuestras pantallas o peor aún, una de las telenovelas más exitosas de todos los tiempos como lo ha sido Avenida Brasil, que en el extranjero ha sido un fenómeno de audiencias, pero que en nuestro país durante sus nueve meses de emisión obtuvo un regular promedio de 8,6 puntos, aparte de la indignación colectiva del gremio de actores.
La desesperación reina en los pasillos del mismo canal que en épocas lejanas arrasaba con Betty La Fea –de cuyos tiempos no queda sino el recuerdo- y no hay que transitar por ellos para sentirla pues esta se percibe desde cualquier sala o cafetería nacional dónde haya un televisor. Las desacertadas decisiones en la organización de la parrilla de programación fueron capaces de sepultar a una producción impecable como lo fue Doctor Mata, la cual –nadie recuerda- sucumbió ante Yo Me Llamo y La Selección. Así mismo, el miedo ante La Voz Kids fue evidente cuando se adelantó el final de Avenida Brasil para darle pie a otra telenovela brasilera, Rastros de Mentiras, que por lo visto también pasará por la pantalla sin dejar rastro alguno de rating.
La crisis que posee a RCN se extiende mucho más allá del prime time. Los espacios de la mañana, la tarde y los fines de semana no son ajenos a ella. Formatos que llevan más de diez años al aire como Muy Buenos Días o Estilo RCN están en la mira de los productores del canal, bien sea para ser reestructurados o para que dejen el espacio libre a ideas novedosas pues el desgaste de los mismos es evidente, como sucedió con Fuera de Lugar o El Lavadero.
Interesante resulta analizar lo que sucede entre los respectivos programas de chismes de ambos canales. Por un lado está La Red y por el otro tenemos a En Exclusiva –en reemplazo del depuesto Lavadero-. Pese a que ambos manejan la misma temática banal e irrelevante, el primero lo hace en medio de un ambiente entretenido y jocoso con presentadores como Mary Méndez o Carlos Vargas cuya imagen genera empatía entre el público, a diferencia de lo que sucede con Graciela Torres tratando de disfrazar un estudio de televisión como si fuera una sala de redacción, al mejor estilo TMZ o provocando a Natalia París para sacar alguna chiva que le sume los puntos de rating que desesperadamente busca, pues si a los tres meses de estrenado el programa este no satisface las necesidades de audiencia, esto significaría la salida de los chismes de la Negra Candela de RCN. Lo más irónico de todo es que tratándose de un canal cuyas figuras dan mucho más de qué hablar que las de la competencia, los chismes se remitan al bebé que algún actor espera junto a su esposa.
No obstante, quien tenga buena memoria recordará que en años anteriores la situación ha sido inversa y que a diferencia de lo que sucede en Estados Unidos –dónde Univisión siempre ha sido superior a Telemundo- o en México –TV Azteca rara vez alcanza a Televisa- aquí en Colombia ninguno de los dos canales tiene la guerra asegurada. Mientras tanto, el molusco se regocija plácidamente en su trono desde la floresta.