Son alarmantes estos hechos en una población de algo más de 60.000 habitantes, en la que la mayoría de su población flotante, son estudiantes que llegan de diferentes partes del país a estudiar en la Universidad de Pamplona.
El aberrante caso de violación hacia una estudiante, de esa institución de educación superior, se dio el pasado lunes 27 de marzo, en horas de la madrugada, cuando la joven se dirigía a una clase que se imparte a las 6:00 a.m. en una de las sedes de la Unipamplona; sin embargo, por miedo a hacer la denuncia pública, la víctima denunció los hechos hasta el día siguiente, lo cual provocó el rechazo absoluto de la comunidad estudiantil y de la ciudadanía en general.
Ante esa nefasta noticia, los ciudadanos, y los estudiantes, como hijos adoptivos de esa fría población, le exigieron a las autoridades municipales (en cabeza del Alcalde Ronald Contreras), acciones inmediatas para dar con el paradero de los responsables del abuso al que fue sometida la estudiante.
Pero sin haber salido del asombro, ante esa situación; el martes, en horas de la noche, fue apuñalado en la espalda el joven Gustavo Iván Badillo Ávila, hecho que se registró en el parque principal, Águeda Gallardo, uno de los sitios más frecuentados de la localidad, por donde transitan cientos de estudiantes a diario.
Según varios testigos, que presenciaron los hechos, cerca de cinco sujetos abordaron a Badillo Ávila para robarle sus pertenencias, pero el joven, de 25 años de edad, salió corriendo para impedir el robo mientras a gritos pedía auxilio, hasta que fue alcanzado por los delincuentes que lo atacaron con arma blanca.
Minutos después, Gustavo Iván, oriundo de Sabana de Torres, Santander, estudiante de primer semestre de Ingeniería Civil, fue ayudado por varios transeúntes que lo llevaron a un centro asistencial donde murió hacia las 9:30 p.m. debido a la gravedad de sus heridas.
La comunidad está pidiendo mayor presencia policial, pues son constantes los atracos que se presentan en la ciudad, como el que se dio la semana pasada, donde delincuentes hirieron con arma de fuego, a la vendedora de un puesto de chance en un sector, que se suponía, era tranquilo en esa localidad.
El 10 de marzo de 2016, publiqué en este mismo portal, una nota titulada: ¿Quiénes están matando a los animales en Pamplona? tras la violenta muerte de dos llamas peruanas que fueron apuñaladas hasta causarles la muerte, sin embargo, a la fecha, las autoridades no saben quiénes son los responsables de ese hecho que en su momento produjo indignación y marchas por las calles de Pamplona.
Hoy no se trata de animales, sino de la vida segada de un joven, víctima de delincuentes que andan al acecho de estudiantes desprevenidos que llegan a Pamplona, esperando encontrar un lugar tranquilo para vivir y formarse.
Estudiantes de la universidad, tienen planeado salir a marchar para exigirle a las autoridades municipales y a las directivas de la institución educativa más importante de Norte de Santander, medidas inmediatas que fortalezcan la seguridad en la ciudad y así evitar que se sigan presentando situaciones que lamentar. Ojalá, estos deplorables hechos, no queden sin resolverse. El año pasado las víctimas fueron animales, este año una vida humana. ¿Qué viene después?
@giginosanleon
fotos tomadas de google