Ximena Quijano lo había superado todo. A los 11 años había superado una leucemia que estuvo a punto de matarla. Uno de los refugios que había tenido es su familia. Por eso su papá fue fundamental para superarlo todo. Su papá, el estudio y su mejor amigo José Antonio Parada, con quien viajó a mediados del 2018 a Puebla a terminar sus estudios en medicina.
Las investigaciones de la Fiscalía de México determinaron que, horas antes del asesinato, Ximena se peleó con una mujer, por un sombrero. La policía mexicana allanó la casa de la mujer y encontró seis vehículos con reporte de robo, narcóticos, municiones y chalecos antibalas.
Esa mujer estaría detrás de la muerte de los dos estudiantes colombianos, del mexicano y del conductor del Uber que murió también en la emboscada que le propinaron al grupo cuando llegaba de un pueblo cercano a Puebla.
El papá de la muchacha asesinada ya se encuentra en México y ha expresado en repetidas ocasiones el dolor profundo que sienten después de perderlo todo