Manuela Gonzalez es mucho más que una cara bonita. Cuando se hizo famosa a los 20 años interpretando a Lolita ya grande al lado de Marcelo Cezán sorprendía con su inteligencia voraz, algo que le ha servido para mantenerse vigente dos década después. Porque a los 42 años Manuela Gonzalez no necesita de telenovelas para que siga siendo deseada y amada por los colombianos
Casada con el fotografo Andrés Vasco y madre de dos hijos, Pedro y Alma, se mantiene como una Instagramer bien dura gracias a su inteligentisima serie en internet Susana y Elvira, considerada por muchos la Sex and the city criolla
Desde el 2018 no aparece en la televisión, por ahora, a sabiendas de la ingratitud de los canales con nuestras estrellas, Manuela ha decidido arrancar su carrera como empresaria y lo hace con éxito. Su línea, A coco, en donde vende productos a base de coco, que van desde el aceite hasta la harina, va viento en popa y basta darse una vuelta por sus redes para ver que se ha independizado por completo de un medio que sólo premia a veinteañeros: