La decisión del aplazamiento de la fecha para elegir al nuevo contralor general de la república, del 3 al 18 de agosto, nada tiene que ver con la ingenua justificación que entregó el presidente del Congreso Roy Barreras, a través de su cuenta de Twitter.
Lo que realmente motivó el cambio de fecha es el desespero creciente en la orilla del petrismo, sin quedarse sin un candidato que se traduzca más adelante en un contralor de bolsillo del nuevo gobierno.
Y las movidas son de toda índole para lograr ese propósito. Se especula que uno de los hombres cercanos al presidente electo Petro, quien gerenció la campaña, Ricardo Roa, viene haciendo lo imposible para que en la lista ingrese el candidato de su preferencia.
Por eso el presidente del Senado Roy Barreras viene cumpliendo la tarea de manera obediente para que el desespero del nuevo gobierno se convierta en tranquilidad, con la inminente llegada a los elegibles para Contraloría, Julio César Cárdenas.
Cárdenas obtuvo un puntaje mediocre. 75.7 en el examen de conocimiento y, como se recordará, se trata de uno de los requisitos para acceder a los 10 finalistas. No obstante, el Congreso se ha visto obligado a una primera modificación de la lista por decisiones judiciales. Y aún falta otro empujón del Tribunal de Cundinamarca para que Julio César Cárdenas tenga la opción de ser el contralor general que Petro quiere.
Pero en esta campaña judicial al parecer han participado varios juristas. En los pasillos del Congreso se han escuchado los nombres de Vladimir Fernández Andrade, actual procurador judicial, el abogado Alberto Yepes, Magda Acosta y Emiliano Rivera, estos últimos de la Comisión Disciplinaria de Justicia. A nadie le consta, pero es un rumor cada vez más creciente.
En el auto del Tribunal Administrativo de Cundinamarca, firmado por el magistrado Moisés Rodrigo Mazabel Pinzón, donde se evidencia de lejos la subjetividad del togado, al ordenar cuáles serían los candidatos, donde excluye al aspirante Carlos Hernán Rodríguez Becerra, quien alcanzó un puntaje de 97.7, muy superior al de Julio César Cárdenas. Se disimuló mucho más el elefante del ex pdte Samper en el proceso 8000.
Como si fuera poco, este magistrado de dudoso equilibrio judicial admitió un desacato, sin importar la decisión que en derecho adoptó la Comisión Accidental del Congreso de la República. Lo más seguro es que este lunes, obligue a los legisladores, incluir sí o sí a Julio César Cárdenas.
Roa y Cárdenas son viejos socios. En 2013 cuando el Roa fue presidente de la empresa transportadora de gas del Grupo de Energía de Bogotá y Julio Cesar Cárdenas era Secretario General de esa transportadora.
Lo cierto es que van a imponer a un contralor general de la república que no obtuvo buen puntaje, empujado por acciones judiciales y políticas. El cacareado gobierno del cambio no es más que una serie de protagonistas, con las mismas prácticas que tanto aborrece la ciudadanía. Es muy probable que la desilusión pronto llegue a los votantes que eligieron a Petro pensando en algo distinto, y parece que es más de lo mismo.