Con bombos y platillos la Federación Colombiana de Fútbol inauguró su sede principal en Barranquilla, una sede que contará con tres canchas de fútbol (dos de grama natural y una sintética), tres camerinos, gimnasio dotado con maquinaria de última tecnología, canchas lúdicas de teqball y fútbol tenis, zonas húmedas con tinas de hidromasajes para hacer crioterapia y sesiones de calor, una piscina diseñada para la recuperación, zonas médicas de recuperación, zona de juegos y entretenimiento, oficinas, auditorio para eventos y conferencias de prensa. El costo total ascendió a 10 millones de dólares y va a estar ubicada en plena Alameda del Río.
La inauguración contó con la presencia de Gianni Infantino quien aprovechó para tomarse fotos con la gente del lugar y hacer proselitismo. Si bien buena parte del periodismo nacional afirma que Infantino estuvo en Barranquilla como un gesto para ayudar al fútbol colombiano, las razones fueron otras.
Infantino aprovechó su visita a Colombia para reunirse con Alejandro Dominguez Presidente de la Conmebol y con Ramón Jesurum para intentar convencerlos de votar a favor de un mundial cada dos años, algo en lo que la mayoría de futbolistas estarían en desacuerdo.
Un mundial de dos años seria nefasto para el rendimiento del fútbol pero en su afán por tener más y más plata están a punto de conseguirlo así las Federaciones europeas no lo aprueben.