En el Banco de la República en Bogotá se presenta la exposición del Víctor Grippo; muestra que se encontrará vigente en la ciudad hasta el 3 de febrero del presente año.
Argentino (1936-2002), hijo de inmigrantes italianos, estudió química y farmacéutica. Empezó a trabajar en el mundo de las artes plásticas desde los años cincuenta mientras investigaba experimentos artísticos que involucraron unas esculturas donde comprendían una triple relación de arte-ciencia y técnica. Se trataba de esculturas con luz que tituló Imágenes del mundo moderno.
Hay que aceptar que la exposición es algo hermética, una instalación conceptual —que tiene explicaciones— recorre varios estadios de su trabajo como la construcción de un Horno de pan que realizó primero en 1972, la serie de Vajillitas de 1977, Humanizar al hombre y humanizar la naturaleza también de 1977, Vida muerte y resurrección de 1980, entre otras.
Víctor Grippo trabajó con las técnicas de la industria rudimentaria mientras intentaba encontrar las razones de la alquimia, como quien busca lo oculto en la materia.
El calor del fuego, la luz y la energía fueron sus temas recurrentes, mientras buscó y estudió la materia en su estadio de trasformación. Por eso le interesaron temas como la vida y la muerte, lo material y lo inmaterial, la trasformación y la regeneración. A Grippo le interesó siempre la forma sistemática de los cambios.
Las papas con el cablerío como el mismo Grippo las matriculó es su obra clásica más popular. Su primera versión la realizó en 1970, la volvió a realizar para una Bienal de Sao Pablo y la siguió realizando para muchas instituciones culturales alrededor del mundo. Hoy se encuentra en Bogotá 17 años más tarde.
A Grippo le interesaron siempre materiales domésticos perecederos con los que realizó sus instalaciones como actos efímeros. Papas conectadas a electrodos que medidas por un voltímetro, muestra la energía de la transformación.
Investigó en las diversas formas de las papas, en una mesa con mantel blanco y negro buscó la analogía de las papas mientras en una parte del mantel estaba dispuesto el plato con unos tenedores humildes mientras que al otro lado, se encontraba el plato fino, los cubiertos elegantes mientras los tubérculos son de acrílico. Como ya comentamos, le interesó la energía de la papa mientras estudiaba la química de la transformación. Ocasionalmente incluye su lema: Naturalizar al hombre y humanizar a la naturaleza.
Se trata se instalaciones conceptuales de fragmentos de la vida cotidiana. Grippo anotó sobre su trabajo: Se trata de extraer fragmentos de la vida cotidiana y, a través de esa porción, resinificarla a partir de la alteración de su concepto habitual. Interesante artista, pero complejo.
Chisme sin confirmar: A Art-Cartagena fueron muchos los invitados de honor la noche de la inauguración pero, los compradores estuvieron escasos.