Jackeline Arevalo tenía tan solo 9 añitos cuando empezó ayudarle a su abuela Margarita Gutiérrez en su restaurante ubicado cerca a la media torta, en la calle 18 1-05 al oriente de la ciudad, el cual duró 45 años sirviéndole ajiaco a los bogotanos. Posteriormente, su mamá, María Cristina Sabogal, también puso un restaurante al lado de la antigua iglesia del barrio Egipto en la localidad de la Candelaria y ahí es cuando se inicia en los quehaceres de la cocina tradicional ayudándole en la preparación de los alimentos.
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Corría el año 2003 cuando la señora Jackeline se quedó sin empleo porque se cansó de las humillaciones a las que era sometida por parte sus patronos donde laboraba y se acordó que en la antigua plaza de mercado del barrio la Concordia, que lleva este mismo nombre, en ese entonces abandonada por el Gobierno distrital, habían varios locales cerrados que podían servirle para llevar a cabo la idea que le rondaba en su cabeza de colocar un restaurante y es allí cuando acude al señor José la Rotta, administrador de la plaza de mercado y le pide que le permita utilizar uno de esos locales abandonados. Don Jose accedió a su petición y le abrió el local.
Es en ese instante donde la Tía Jackie decide continuar con el legado de su abuela Margarita y su mamá María Cristina de hacer realidad su sueño y monta un restaurante con la ayuda de sus hermanas y sobrinas. El primer día hicieron 10 almuerzos y vendieron 4, al siguiente día prepararon 15 y vendieron 6 y allí cogió vuelo el negocio que llegó a vender hasta 160 almuerzos y 60 desayunos en aquella época y cada uno costaba en ese entonces 2.200 pesos. Sus primeros comensales fueron los dueños de los 10 locales que funcionaban en la plaza y los habitantes del barrio.
Hoy, la plaza de mercado la Concordia está renovada y cuenta con cerca de 40 locales funcionando plenamente y uno de esos es el restaurante Tía Jackie, que ya tiene 20 años preparando el mejor y más tradicional Ajiaco de Bogotá porque se ha mantenido la tradición de la mamá y la abuela en sus preparaciones gastronómicas. En el 2020 se hizo acreedora al título del mejor ajiaco de Bogotá otorgado por el Instituto Distrital de Turismo, alcanzando mucho reconocimiento.
“Porque aquí si se prepara el tradicional Ajiaco santafereño con arracacha y las tres papas, dos blancas y una amarilla, conservamos la tradición, hay ajiacos de ajiacos y aquí está el original”, dice doña Jackie y el truco es cocinar con amor y tradición. El restaurante lleva este nombre en honor a sus sobrinas que mucho la apoyaron en sus inicios, cuenta con seis empleadas y sus dos hijas que la acompañan en pos de continuar con dicha tradición y no se pierda ese legado.
El restaurante Tía Jackie abre sus puertas a las 7 de la mañana y cierra a las 5 de la tarde de domingo a domingo y el plato más caro cuesta 30 mil pesos, mientras que el más barato, que es para abuelos y estudiantes, vale 10 mil pesos. El popular ajiaco santafereño tiene un precio de 20 mil, pero, próximamente, subirá el costo. Tiene dos presentaciones con pierna pernil y pollo desmenuzado. Por donde la tía Jackie han pasado muchos extranjeros de España, Alemania y Francia que llegan a probar el delicioso ajiaco y quedan encantados.
Los días que más se venden son los fines de semana con hasta 70 platos de ajiaco en un solo día.
