Si hay que hablar de un delantero de Santa Fe que hizo vibrar a los hinchas leones, Wilder Medina tiene que estar en el radar de todos. El goleador paisa hizo temblar en más de una ocasión el Estadio Nemesio Camacho el Campín a punta de derechazos y se ganó el título de ídolo. Inició su carrera como muchos soñadores del balompié, desde abajo, pero cuando tocó el cielo con las manos, la malas decisiones lo llevaron a caer en el mundo de la drogadicción y los vicios. Ahora, totalmente renovado, lo que hace Wilder Medina es un ejemplo para muchos deportistas que no supieron aprovechar su carrera.
| Vea también: La millonaria familia detrás de El Campín, el estadio que se hizo para unir a Bogotá
Los inicios de Wilder Medina, el ex delantero de Santa Fe
La historia de Wilder Medina y el balón inició en Puerto Nare, su tierra natal, cuando acompañaba a su padre a algunos partidos de futbol aficionado. Su papá era arbitro, por lo que siempre lo impulsó a que viera en el balompié una profesión. Aun así, en 1997 su mentor falleció, pero él, decidido a no defraudarlo, comenzó a trabajar para ser un jugador de pura cepa. En 1997 se mudó con su mamá a Rionegro, y allí, en el Deportivo Rionegro, comenzó a formarse en la inferiores del club.
Sin embargo, y conforme asistía a los entrenamientos, su vida también empezó a ligarse con el mundo de las drogas y las pandillas, y con apenas 16 años, empezó a formar parte de algunos grupos a los que le gustaba la pelea. Según ha contado en algunas entrevistas, el primer aviso de peligro lo vivió cuando a la casa donde se reunía la banda lanzaron una granada, apenas 30 segundos después de que él había salido. Por supuesto, dejó ese mundo y se dedicó a patear balones, pero esos demonios lo volverían a molestar durante toda su carrera futbolística.
Las drogas y las pandillas, los obstáculos del futbolista
Apenas en su primer año como profesional, la Dimayor decidió suspenderlo durante un año por dar positivo en un control antidopaje y le dañó lo que pudo haber sido su llegada a un equipo argentino. Wilder Medina tuvo que esperar hasta 1998 para poder debutar en el fútbol colombiano y demostrar de lo que estaba hecho logrando llamar la atención del mismísimo poderoso Independiente Medellín. Al equipo paisa llegó en el año 2000, pero por temas de lesiones no pudo hacerse un espacio en la plantilla y se convirtió en un nómada del fútbol. En los próximos años pasó por Atlético Huila y Envigado, pero en Patriotas, en la segunda división, anotó 20 goles en el finalización 2007 y despertó el interés del Deportes Tolima, equipo en el que brillaría.
De la mano de Gabriel Camargo, Wilder Medina llegó al equipo pijao en el año 2008 y tuvo que esperar un año para empezar a cumplir con goles. Vestido de vinotinto y oro, el antioqueño deslumbró en cada partido y fue importantísimo para que el Tolima llegara a la final del torneo en el año 2010. Sin embargo, de nuevo los fantasmas de las drogas tocaron a la puerta y en el año 2011 fue suspendido, otra vez, por dar positivo para doping. Del equipo tolimense lo despidieron y su carrera parecía no tener futuro.
Tolima Pictures That Go Hard pic.twitter.com/Y6bJlx1wPH
— ODY (en la calvoneta 👨🦲) (@ODY__27) August 16, 2022
| Le puede interesar: Tres poderosos empresarios colombianos que se han hecho millonarios exportando futbolistas
La resurrección y la recaída del exdelantero de Santa Fe
Aun así, en el año 2013 apareció Agustín Julio y lo fichó para Independiente Santa Fe, en lo que fue la mejor decisión de su carrera en el balompié. Wilder Medina llegó de inmediato al equipo y sus zapatazos empezaron a inflar redes. Ese año Santa Fe llegó a la final del torneo apertura y se clasificó a la semifinales de la Copa Libertadores de América, siendo el delantero una pieza fundamental para dichos resultados. Su nombre quedó grabado en oro un 16 de mayo de 2013, cuando su gol ayudó a los leones a eliminar al poderoso Gremio de Brasil.
Hoy hace 7 años con gol de Wilder Medina vencimos 1-0 🦁a Gremio 🇧🇷 en El Campín 🇲🇨 y avanzamos a los cuartos de final de la @Libertadores
— Independiente Santa Fe (@SantaFe) May 16, 2020
¿Lo recuerdan? pic.twitter.com/vYJWUSMVTQ
Esa fue la última vez que Wilder Medina tocó el cielo con las manos en su carrera futbolística porque después, de nuevo, las drogas y el alcohol lo llevaron por un camino que no parecía tener final. El goleador se retiró en el año 2017, después de haber militado para clubes de ribetes menores, y desde ese momento no volvió a sonar, al menos no por cosas buenas. Imágenes de él perdido en el vicio rondaron las redes sociales y parecían ser la prueba de que, del goleador que rugió en el rojo bogotano, no quedaba ni la sombra.
Ser testimonio, lo que hace Wilder Medina lejos de los vicios
No obstante, y gracias al apoyo de su mamá y sus hijos, Wilder Medina logró salir del mundo de las drogas y el alcohol, y en los últimos años se le ha visto enderezar su camino siendo coach de vida y volviendo al lugar donde fue feliz en cientos de ocasiones, las canchas de fútbol. Es más, fue parte del reconocido reality 'La isla de los famosos' de RCN, y allí confirmó que su vida de excesos había acabado. A través de sus redes sociales, el delantero de Santa Fe se ha dedicado a ser testimonio de que del infierno de los vicios sí se puede salir, y más importante aun, se puede evitar caer en ellos.
Ahora, el presente de Wilder Medina se desarrolla encima de los escenarios y compartiendo con los aficionados que en algún momento lo idolatraron por sus goles. Encontró en Dios una respuesta y su misión de vida es enseñar esa respuesta a los demás. El goleador sigue rugiendo en los campos de fútbol, pero no en grandes estadios como el Campín o el Metropolitano, sino en canchas de barrio, al lado de futbolistas amateurs que, como él, tienen la ilusión de algún día poder ser profesionales y hacer temblar los escenarios deportivos.
| Lea también: