El 21 de noviembre Daneidy Barrera cometió el peor error de su vida: en pleno paro nacional se filmó destruyendo una estación de Transmilenio. Unos días después un juez ordenó cerrarle sus redes sociales lo que le ocasionó perder casi cinco millones de pesos que ganaba mensual por sus videos:
Inmediatamente la Fiscalía le imputó los delitos de perturbación al servicio público, daño en bien ajeno e instigación a delinquir con fines terroristas. La joven se había hecho famosa desde junio del 2015 cuando en plena Copa América sacó un video cantando una canción que se haría famosa en todo el país:
La joven tendrá que pagar 1.200 millones por los destrozos, una cifra que, según su abogado Andrés Sossa la joven, quien vive en el barrio Castilla al sur de Bogotá, no tiene como pagar. Esto sería el fin para una de las youtubers más cuestionadas del país. Durante el mundial de Rusia, en el 2018, en una escala que hizo en París se bañó en la fuente del museo del Louvre
El furor que despertó su canal de Youtube fue tanta que hasta el entonces presidente Santos se refirió a ella en una intervención:
Incluso en este programa Vicky Dávila hace un debate y afirma que fue el Premio Nobel del 2016 quien ayudó a disparar su fama. Ya no habrá más videos de Epa Colombia, algo que muchos celebran pero que otros toman con amargura: ver haciendo el ridículo a alguien es uno de esos placeres culposos que casi nadie reconoce. En sus cinco años al aire Epa Colombia alcanzó a hacer cerca de un millón de seguidores en sus redes sociales. En Instagram empezaba a ser una de las mejores pagadas. Ahora, su imprudencia no sólo le quitó su medio de subsistencia sino que también la haría meter presa ya que no tiene un sólo peso para pagar el vandalismo que cometió en la jornada del paro nacional de noviembre y que ella misma ayudó a difundir en redes.
