Tanto la antropología como la fotografía nacieron a mediados del siglo XIX, y cuando la fotografía se hizo extensiva, los antropólogos vieron en esta actividad una herramienta adecuada para documentar sus trabajos de etnografía. Fotografiar a las comunidades en su entorno social, ha permitido a la antropología analizar y describir la diversidad cultural de los seres humanos.
Fotografía y antropología se han convertido en dos disciplinas que no solo se complementan sino que además permiten estudiar desde dos lentes al ser humano, sus culturas y sus formas de habitar su entorno.
Esto es lo que nos muestra la exposición “Retractus. Narrativas visuales en el trabajo antropológico colombiano”, que se expone por estos días en el Claustro de San Agustín, desarrollada de manera conjunta entre la Dirección de Museos y Patrimonio Cultural (DMPC), el departamento de Antropología de la Universidad Nacional de Colombia y el grupo estudiantil Obtura.
La exposición presenta 50 retratos fotográficos resultado de etnografías y trabajos de campo llevados a cabo a lo largo y ancho del territorio colombiano. 50 circunstancias vitales distintas, construidas por las miradas de 24 fotógrafos de campo y más de 50 personajes conforman la muestra. Campesinos, indígenas, niños y ancianos son los protagonistas de un conjunto de fotografías que nos dejan ver la diversidad colombiana y su riqueza étnica y cultural desde la perspectiva visual.
Las reproducciones que conforman la exposición fueron seleccionadas a través de una convocatoria pública que buscó vincular a estudiantes, profesionales y demás interesados en la antropología visual para que participaran con sus registros fotográficos.
Para Juan Sebastián Gómez, Coordinador del grupo Obtura, “la exposición busca circular las fotografías de los trabajos de campo, ya que dichos documentos son un medio efectivo para el estudio y la comunicación de ideas, conceptos e historias”.
Según Gómez, en esta exposición, los mejores trabajos, resultado de etnografías y salidas confluyen en un escenario donde convergen ideas, se socializa el trabajo antropológico, y los visitantes pueden conocer un poco más desde una óptica visual.
Con Retractus se pone de relieve el modelo de gestión del patrimonio cultural que desarrolla la Universidad Nacional de Colombia en los últimos años. Para Edmon Castell, director de la Dirección de Museos y Patrimonio Cultural, “este modelo de gestión se basa en la gobernanza cultural que consiste en la cooperación entre diversas instancias académicas y administrativas, que permiten sumar esfuerzos y desarrollar proyectos como Retrauctus”. Un proyecto que nos demuestra que, al sumar, la Universidad Nacional multiplica y amplia nuestro rango de acción geográfico, académico y cultural, señala Castell.
Con “Retractus. Narrativas visuales en el trabajo antropológico colombiano”, la antropología visual adquiere protagonismo, permitiéndonos descubrir la diversidad cultural y geográfica del país, así como las múltiples historias de quienes habitan nuestro territorio, vistas a través del lente.
La exposición estará abierta hasta el 23 de noviembre de 2014 y estará acompañada de diversas actividades de socialización con las que se busca acercar a los visitantes a que se interesen y profundicen por la temática de la antropología visual.
