Soportar a un tipo como James Rhodes es muy difícil. Tiene la energía oscura. Se levanta a las dos de la mañana a pelear con sus demonios, los mismos que lo atormentan desde los 12 años cuando su profesor de colegio empezó a violarlo. Lo hacía tan duro que le generó problemas de columna que hoy le sacan lagrimones tan grandes como bombillas. En Inglaterra parecía condenado al frio y la lluvia eterna, Londres y la gente con cara de culo, la que considera una ofensa sonreír, saludar.
La música, y en especial Bach, salvaron a Rhodes del suicidio. El piano fue el canal que utilizó para desahogarse. Y ahí encontró las razones para estar vivo, sin embargo siempre es un problema mantenerse a flote. Así que en Instrumental, sus terribles memorias donde mostró todo el infierno de su niñez, pudo exorcizarse, perdonarse, avanzar. El libro fue un éxito en ventas y críticas. Todos esos puñeteros sabihondos que lo acusaban de edulcorar a Chopin debían morderse la lengua. Vino la fama, los conciertos por todo el mundo. Lo vimos dos veces en Colombia, la primera vez en el imponente Teatro Colón, la segunda en el Jorge Eliecer Gaitán. Llenos a reventar. La manera como Rhodes acercaba a los laicos a la religión del Heavy Metal era realmente conmovedora. Comentando largamente la experiencia de Mozart, de Bach, de Beethoven, de Satie a partir de su visión servía para seducirnos a los que no sabemos nada de música clásica.
Sin embargo, el trasladarse a España, le curó el alma. La amabilidad ibérica, la comida, la música, el sol le iluminó el alma, el reconocimiento de un país que lo ama. En Made in Spain, su nuevo libro, también habla de los problemas que tuvo con los círculos más conservadores de España debido a la insistencia de que la aprobaran la ley de protección al menor, sus desencuentros con el Presidente Pedro Sanchez y el apoyo que recibió de los círculos más progresistas como Pablo Iglesias.
Un libro apasionante que habla de la calma después de la tormenta emocional pero, ojo, también es un libro sobre la música y sobre la belleza de un país. Un libro imprescindible para ser feliz.