En un exhaustivo informe el contralor Maya encontró encontró 161 irregularidades en los procesos de contratación y seguimiento en el Sena, una entidad que maneja un presupuesto anual de $ 3 billones y que ha estado por años catalogada como la entidad más querida por los colombianos.
En la implementación de los Acuerdos de paz firmados en La Habana, el Sena quedó con el compromiso de ampliar su cobertura en 53 municipios ubicados en las áreas donde fueron delimitadas como zonas veredales donde los guerrilleros de las FARC comenzaron su reincorporación. La evaluación de las Farc frente a la oferta formativa del Sena no fue positiva pero lo peor fue que estuvieron lejos de cumplir con el compromiso.
Según la Contraloria de los 7000 exguerrilleros ubicados en las zonas veredales el Sena solo ha logrado certificar 268 personas en diferentes actividades que funcionarán como su futura actividad económica, es decir, no alcanzó ni siquiera a llegar al 1%. Un ejercicio que debió iniciarse el 1 de enero y duraría seis meses y el que Prada, actual Secretario general de la Presidencia, promocionó hasta la saciedad.
