Un enfoque holístico se refiere a considerar y abordar un tema o problema de manera integral y completa, reconociendo las múltiples interacciones y conexiones entre sus diferentes aspectos. En lugar de enfocarse únicamente en una sola parte o componente, se busca entender cómo todas las partes se relacionan entre sí y cómo afectan al conjunto.
La prosperidad de un país está profundamente influenciada por la interacción entre la economía, la cultura y la política, desde una perspectiva holística. Estos tres elementos están estrechamente entrelazados y pueden afectarse mutuamente de diversas formas.
1. Economía: Nuestra Constitución Nacional ordena en su ARTICULO 334 Artículo modificado por el artículo 1o. del Acto Legislativo 3 de 2011. El nuevo texto es el siguiente:> La dirección general de la economía estará a cargo del Estado. Este intervendrá, por mandato de la ley, en la explotación de los recursos naturales, en el uso del suelo, en la producción, distribución, utilización y consumo de los bienes, y en los servicios públicos y privados, para racionalizar la economía con el fin de conseguir en el plano nacional y territorial, en un marco de sostenibilidad fiscal, el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes, la distribución equitativa de las oportunidades y los beneficios del desarrollo y la preservación de un ambiente sano. Dicho marco de sostenibilidad fiscal deberá fungir como instrumento para alcanzar de manera progresiva los objetivos del Estado Social de Derecho. En cualquier caso el gasto público social será prioritario.
El Estado, de manera especial, intervendrá para dar pleno empleo a los recursos humanos y asegurar, de manera progresiva, que todas las personas, en particular las de menores ingresos, tengan acceso efectivo al conjunto de los bienes y servicios básicos. También para promover la productividad y competitividad y el desarrollo armónico de las regiones.
La sostenibilidad fiscal debe orientar a las Ramas y Órganos del Poder Público, dentro de sus competencias, en un marco de colaboración armónica.
El sistema económico del país, sus políticas económicas, monetarias, comerciales y fiscales, desempeñan un papel fundamental en su prosperidad. Una economía sólida y diversificada puede generar empleo, aumentar la producción y elevar el nivel de vida de la población. Por otro lado, factores como la inflación, el desempleo o las crisis financieras pueden afectar negativamente la prosperidad.
2. Cultura:Nuestra Constitución Nacional ordena en su ARTICULO 67. La educación es un derecho de la persona y un servicio público que tiene una función social; con ella se busca el acceso al conocimiento, a la ciencia, a la técnica, y a los demás bienes y valores de la cultura.
La educación formará al colombiano en el respeto a los derechos humanos, a la paz y a la democracia; y en la práctica del trabajo y la recreación, para el mejoramiento cultural, científico, tecnológico y para la protección del ambiente.
El Estado, la sociedad y la familia son responsables de la educación, que será obligatoria entre los cinco y los quince años de edad y que comprenderá como mínimo, un año de preescolar y nueve de educación básica.
La educación será gratuita en las instituciones del Estado, sin perjuicio del cobro de derechos académicos a quienes puedan sufragarlos.
Corresponde al Estado regular y ejercer la suprema inspección y vigilancia de la educación con el fin de velar por su calidad, por el cumplimiento de sus fines y por la mejor formación moral, intelectual y física de los educandos; garantizar el adecuado cubrimiento del servicio y asegurar a los menores las condiciones necesarias para su acceso y permanencia en el sistema educativo.
La Nación y las entidades territoriales participarán en la dirección, financiación y administración de los servicios educativos estatales, en los términos que señalen la Constitución y la ley.
La cultura del país, incluidos sus valores, creencias, tradiciones y normas sociales, también influye en su prosperidad. Una cultura que fomente el trabajo en equipo, la educación, la innovación y la tolerancia puede impulsar el progreso y el desarrollo económico. Además, una identidad cultural sólida puede atraer el turismo y fortalecer la cohesión social.
3. Política: La estabilidad política y la calidad de las instituciones gubernamentales son determinantes clave para la prosperidad de un país. Un sistema político justo, transparente y democrático puede fomentar la confianza en el gobierno y en el sector privado, lo que a su vez promueve la inversión extranjera en términos equitativos, de igualdad, justos y el crecimiento económico. Por el contrario, la corrupción y la inestabilidad política generan incertidumbre y desalientan la inversión y el desarrollo.
En resumen, la economía, la cultura y la política están estrechamente interconectadas y se influyen mutuamente en el camino hacia la prosperidad del país. Un enfoque holístico que tenga en cuenta estas interacciones puede ser crucial para promover el desarrollo sostenible y equitativo en la sociedad.
