Hace 10 días, como muchos de los personajes poderosos de este país que desean recibir los consejos del experimentado periodista y escritor Gustavo Álvarez Gardeazábal, el candidato Enrique Peñalosa decidió visitarlo en su finca El Porce. Todo indica que el almuerzo y las variadas conversaciones cayeron pesadas entre el anfitrión y la visita. Gardeazábal publicó en su columna diaria de ADN, que Peñalosa es un hombre despresciativo con toda la gente a su alrededor, y que está tan agrandado que cree que le va a ganar las elecciones a Santos en segunda vuelta sin ninguna ayuda de los que lo rodean. “Actuando como bogotano de rancia alcurnia, da la sensación de que para él, Colombia no ha cambiado en 20 años”, escribió el periodista.
El canciller Murillo tiene en su despacho la suerte disciplinaria de Armando Benedetti
Su conducta como embajador en Caracas llevó a la apertura de un proceso al que se le sumó la denuncia de su esposa por agresión cuando era embajador ante la FAO
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