"Porque la mentira no nos puede derrotar.... y la verdad se escuchará". Con esta frase de guerra, el alcalde de Ipiales, Ricardo Romero, lanzó su proyecto de Red Cívica de Prensa, con el cual se pretende según el mandatario, lograr que la ciudadanía invente, innove y genere formas de comunicación desde las veredas y los barrios.
En el periodismo local, el anuncio generó diversas opiniones. Para Mario Obando director de noticias de Radio Las Lajas, el tema es un intento por descalificar el periodismo local, con el cual se pretende que solo se escuchen aplausos para el gobernante de turno.
Por su parte, para Miguel Rojas, director de noticias de Radio Ipiales, la propuesta es bien recibida, en el sentido que se capacite a nuevas generaciones que se interesen en los medios de comunicación. Pero evidencia su preocupación en la medida que se caiga en modelos similares a los implementados por gobiernos como el de Venezuela, Ecuador y otros donde lo que se genera son "periodistas militantes".
Los periodistas como Ómar Pinchao y Claudia Castro coinciden en afirmar que el uso de recursos públicos en la conformación de una red de prensa al servicio de un grupo político, no beneficia a la comunidad.
Ómar Bernal, director de Noticias Viva en FM señaló que la propuesta del alcalde responde a los estilos represivos de gobiernos que se sienten incómodos y preocupados cuando lo que dice la prensa no los beneficia, y calificó la iniciativa del alcalde de estar motivada por ideologías de extrema.
"Romero no cree en la prensa ipialeña. Además el proyecto no tiene ni patas ni orejas; es una utopía" dijo Carlos Oviedo, director de noticias de Radio Viva en AM.
La polémica propuesta del alcalde, sin embargo, es coherente al discurso de campaña, cuando descalificó en varias oportunidades a la prensa local, acusándolos de estar al servicio de grupos políticos corruptos y de recibir millonarios contratos.
Se sabe que el proyecto de la Red Cívica de Prensa ya está financiado, aunque aún no se sabe cuánto nos costará a los ipialeños, y si la independencia como aroma ineherente del buen periodismo estará.