Degas perteneció a los Impresionistas pero no fue uno de ellos. Él nunca estuvo interesado como los otros del grupo en la luz exterior o en los cambios que esta produce sobre la realidad. Degas buscaba la perfección mediante una dedicada observación de los caballos y de sus conocidas bailarinas llamadas entonces ratas porque casi todas eran hijas de lavanderas de París. Pasaba mucho tiempo mirándolas ensayar en la ópera, y horas enteras observando caballos. Degas fue un obsesivo solitario. Sus pocos amigos eran el grupo de Impresionistas, Monet, Manet y también escritores de la época como Valery.
La película documental Pasión por la Perfección que exhibe Cine Colombia el 29, 30 y 31 de este mes, revisa la colección del museo inglés Fritzwilliam, conformada por todas las obras que quedaron olvidadas en el estudio de Degas después de su muerte, más de 150 piezas en arcilla, cera y plastilina. Su búsqueda de la perfección nunca le permitió considerarlas terminadas y firmarlas, incluyendo la más famosa de sus bailarinas en cera exhibida en la National Gallery en Washington. Al ponerle a esta escultura la cinta en la cabeza, el tutú y las baletas, Degas anticipaba su teoría conceptual del objeto.
La película muestra sus obsesiones solitarias evidenciadas en esta extensa colección de piezas sin terminar, obras revestidas de la intensidad de su búsqueda de la perfección que lo condujo a hacer algo que su época no había visto: la búsqueda del movimiento de cada músculo de un caballo, de su anatomía o del movimiento de las bailarinas cuando bailan o descansan, cuando se ponen o quitan las zapatillas. Su interés por el movimiento lo llevó a desarrollar una actitud pictórica que, como Leonardo, mostraba cada detalle de lo que hace posible el movimiento en la anatomía humana y animal. Es sus retratos es mucho más rígido, hizo muchos de las familias de sus aristocráticos amigos en los que el negro de Manet estaba presente en sus comienzos pero que, poco a poco, se fue diluyendo hacia una técnica más acorde con sus temas creativos.
Degas nació en 1834 en París dentro de un mundo aristocrático que le dio acceso a toda una variedad de colecciones de arte importantes lo cual lo signó diferente en el grupo de Impresionistas. Esta película documental resulta muy interesante porque expone la colección del museo Fritwilliam y porque se acerca a la vida íntima de un hombre obsesionado por una perfección que, irónicamente, nunca creyó alcanzar pese a que lo hizo. Vale la pena también visitar la Colección Botero del Banco de la Republica que incluye una pequeña bailarina de Degas.
