Si existe un símbolo de la tragedia de Armero son los ojos agonizantes, de pupilas dilatadas, de esa niña de 13 años. Dos días enteros Colombia, impotente, sufrió con ella. Suplicó por encontrar una motobomba que ayudara a drenar el agua y la pudieran sacar del lodo. Ella misma narraba mientras agonizaba, sostenida sobre los cuerpos de su tía y de su mamá. Omaira murió el 16 de noviembre de 1985. De la Armero que borró la avalancha en que murieron veinticinco mil personas, queda poco. La tumba de Omaira es el recuerdo más doloroso.
La peregrinación a la tumba de Omaira en Armero
La niña muerta ante los ojos impotentes de todo el país se convirtió en el símbolo de la tragedia, en la que murieron 25 mil personas hace 33 años