La Fiscalía imputó a Emilio Tapia por los delitos de fraude procesal y falsedad de documentación privada por su implicación en el escándalo de corrupción entre la Unión Temporal de Centro Poblado y el ministerio de las TIC, dictándole medida de aseguramiento en centro carcelario el pasado septiembre 23. Sin embargo, el contratista logró evadir la justicia y fue recluido en la clínica La Misericordia de Barranquilla, alegando estrés y ansiedad.
Este miércoles, 6 de octubre, se reanudó la audiencia contra Tapia. La Fiscalía exige que sea recluido en la cárcel La Modelo de la ciudad de Bogotá, pero Alejandro Sánchez, abogado defensor del contratista, expone que debido a las amenazas en su contra, lo más seguro para su cliente sería quedarse en Barranquilla, en el Batallón Militar de Malambo o en un centro penitenciario de mediana seguridad, como la cárcel La Modelo de la Arenosa.
Además, el núcleo familiar de Tapia esta radicado en Barranquilla en donde vive su esposa y sus 3 hijos (18, 11 y 9 años de edad). A esto se suma, que el contratista se someterá a procedimientos médicos según comprueba su historial clínico.
Emilio Tapia deberá esperar hasta el viernes 8 de octubre para conocer la decisión de la Fiscalía sobre su próximo paradero.