La salida de Álvaro Leyva de la Cancillería fue un efecto mariposa que terminó alterando la normalidad de varias entidades y provocando cambios en el Gobierno Petro. Además del propio Ministerio de Relaciones Exteriores, donde hubo cambios obligatorios en Embajadas y en la cúpula de la entidad, terminaron afectadas las cabezas de la Dian y del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo. Aunque eso sí, en esos dos últimos casos influyeron también otros factores.
**Han sonado la Embajada en Bélgica y la representación de Colombia en el Fondo Monetario Internacional
La última pieza de dominó que terminó cayendo fue el economista Luis Carlos Reyes, cuya hoja de vida fue publicada en el portal de la Presidencia como aspirante al cargo de Ministro de Comercio, Industria y Turismo, algo que se venía rumoreando desde hace algunas semanas y que finalmente terminó por confirmarse. Este nuevo reto en su carrera profesional se da después de su salida de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), donde logró convertirse en una especie de influencer popular entre los ciudadanos, pero donde su administración fue duramente criticada hasta el punto de que sus propios empleados le pidieran la renuncia.
Durante los últimos meses, incluso mucho antes de que se hablara de una posible salida de Reyes de la Dian, se ha hablado bastante sobre una presunta ruptura entre el hombre conocido como Mr. Taxes y Ricardo Bonilla, el ministro de Hacienda. Estas diferencias vendrían desde bien iniciado el Gobierno Petro y habrían tenido varios capítulos, como cuando Reyes criticó las proyecciones económicas de Bonilla.
La solución salomónica del Presidente fue no sacrificar a ninguno de los dos, pero asegurarse de que las relaciones entre Minhacienda y Dian se mantuvieran en buenos términos. Entonces, para ser la cabeza de los impuestos y las aduanas se eligió a alguien de la cuerda de Bonilla como Jairo Villabona al tiempo que Reyes era enviado a una entidad acorde a su perfil profesional.
Germán Umaña, el único eslabón perdido de la cadena
Esa decisión del Gobierno tenía entonces otro efecto colateral, la salida de Germán Umaña, quien presentó su renuncia el 23 de mayo. Se conoció que al ingeniero industrial le habrían ofrecido la Embajada de Colombia en Bélgica, de donde acaba de salir Jorge Rojas y que, además, el propio Presidente le habría ofrecido ser el representante de Colombia en el Fondo Monetario Internacional (FMI). Sin embargo, aún no se confirma ninguno de los dos nombramientos y la W reveló que el bogotano estaría molesto por el trato que se le ha dado y que no aceptaría ninguno de los dos ofrecimientos.
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