La obra más personal del gran director español está en Dolor y gloria, tal vez el maquinal visual más intimista de su trabajo cinematográfico, puesto en escena como metáfora emocional de su vida como Pedro y a la vez como Almodóvar.
La historia plantea los diferentes aspectos y momentos de la vida de un consagrado y enfermo director cinematográfico Salvador Malló, reflejo omnipresente e inmediato de Almodóvar, quien en su adultez rememora en la pantalla a su inolvidable madre, al gran amor y a la vez a su película más insigne, la mítica y transgresora La ley del deseo.
Almodóvar es indiscutiblemente un clásico, su cine siempre genera siempre una inusitada expectación y controversia, siendo sus fantásticas historias una oportunidad imperdible de observar su reinterpretación de las mujeres, de los hombres que desean serlo y del drama del amor y de los sentimientos y de la contradicción.
En esta oportunidad Pedro es el protagonista, alejado de ficciones su vida es la metáfora llevada a la pantalla por Antonio Banderas, ganador del Festival de Cannes 2019 como mejor actor por este papel, inseparable acompañante de sus filmes más provocadores en la década del ochenta en títulos tan figurativos como Átame, La ley del Deseo, Matador y Mujeres al borde de un ataque de nervios.
Dolor y gloria cuenta con la belleza estilística y técnica ya característica de sus últimas películas, el eterno color rojo es matemático y las emotivas sensaciones de los sonidos evidencian en el transcurso de las escenas un poderoso soundtrack orquestado por el brillante músico Alberto Iglesias y con fragmentos portentosos de Mina, Chavela Vargas y Rosalía. Vale la pena también resaltar las majestuosas actuaciones de dos de sus actrices más simbólicas de sus filmes, la monumental Julieta Serrano y Penélope Cruz.
Este nuevo proyecto del director manchego es sin duda la pieza cinematográfica más autobiográfica e íntima de su brillante carrera como creador y es una estupenda y única oportunidad de conocer al chico Almodóvar más relevante: el enigmático Pedro.