-Bueno, pues actualmente soy panadero. 20 años de experiencia. Y productor campesino de toda la vida.
-¿Y cuál es su mayor lucha en este momento?
-Mire, durante la bonanza de la coca aquí la gente sembraba, trabajaba las hojitas y luego a echar trago. Eso nos dejó una cultura facilista. Ahora que está malo el negocio de la coca, por esa cultura que le digo, la gente se está yendo o se dedica a talar bosque para vender la madera o meter ganado. Talan sin piedad, lo que más puedan. Pelan montañas. Mi mayor lucha es contra esa cultura.
-¿En alguna organización?
-Nooo. Con mi papá, los hermanos, la señora mía, unos amigos por ahí. Estamos montando una granja silvopastoril. Queremos tener ganado en poquito espacio, conservar franjas de bosque, sembrar de acuerdo a la vocación que tiene la tierra, recuperar la vegetación nativa. ¿Si me entiende?
-Más o menos
-Si logramos sacar esa granja adelante estoy seguro que otros se van a querer copiar, van a decir ‘aaah esto también es bueno, es rentable’. Y como aquí todo es como una moda, queremos ser pioneros, dar ejemplo. Imponer la moda.
Jhon Jairo Rodríguez Tovar.
Solano, Caquetá.