Aunque China nos resulta un lugar bastante exótico --comida, costumbres e idioma-- para los futbolistas parece ser el escape a la presión mediática, y es la mejor forma de asegurar su futuro económico, el de su familia y el de sus herederos. China está haciendo una inversión en el fútbol contratando jugadores de 'perfil medio', -ni muy estrellas, pero sí reconocidos-, para elevar el nivel y nombre de su liga.
Sin embargo, parece que nuestros héroes del mundial de Brasil priorizan el dinero antes que la gloria, (bueno, ese termino de gloria entra en un debate eterno). Nosotros los hinchas estamos estupefactos por aquellas decisiones. Los colombianos soñamos con tener una selección tipo Dream Team; que nuestros jugadores sean los mejores, que estén en las mejores ligas, pero para eso aún falta mucho. Yo le adjudico a José Pékerman cambiar un poco el chip de "el querer ser" al " en verdad somos"; por ese cambio de pensamiento llegamos tan lejos en el último mundial, pero luego de dicha cita parece que la gasolina se acabó y retornamos a esa selección de jugadores que juegan en México, Argentina y una que otra liga Europea, (sin ánimo de ofender a ninguna de estas ligas). Aunque ninguno de nuestros jugadores ha podido dar ese salto de calidad para colocarlo en la gloria eterna de un equipo grande de Europa.
¿Qué pasó? Esa es la pregunta que todos nos hacemos al ver que Jackson Martínez, luego de tan solo 6 meses en el Atlético de Madrid, prefirió eludir la carga y el reto para irse a China. Por su parte, Fredy Guarín, uno de los capitanes del Inter de Milán, también decidió tomar el mismo rumbo, donde cabe mencionar, está uno de los jugadores con más clase para manejar el balón, Giovanny Moreno, quién luego de irse a China jamás volvió a figurar en Colombia.
¿Cómo les irá? ¿Cómo la pasarán? Estas son preguntas sin respuesta porque ninguna cadena deportiva cubre una liga de un país que es más reconocido por sus tradiciones, por su comercio, que por su fútbol. China se une a la lista de países como Estados Unidos y Emiratos Árabes, los cuales poseen mucho dinero y descubrieron que el fútbol es un negocio.
Aunque los hinchas somos los que le damos valores sentimentales, los empresarios viven por una tajada del gran botín que produce hoy este deporte que tanto queremos.
Me preocupa es el hecho que nuestros jugadores no puedan brillar en Europa. Tiene fútbol y calidad, pero ¿Será que si tienen la mentalidad ganadora ? ¿Será que los colombianos sí están hechos para ser protagonistas y soportar la presión de ser los mejores?, Al parecer la respuesta es un no. Respeto la decisión de ir a China, es obvio que reciben mucho dinero y que buscan asegurar un bienestar familiar. Sin embargo, si dejamos de criticar, los apoyamos y al final, --aunque estén en el otro extremo del mundo-- los seguimos convocando, les decimos que estamos orgullosos de su decisión, formamos una selección colombo-china y dejamos de crear tanto programa de polémica futbolera para cuidar a nuestros representantes. Porque al parecer somos unos niños caprichosos, que queremos siempre lo mejor y cuando lo tenemos lo descuidamos con tanta crítica.
Es hora de darle apoyo a nuestros representantes; queríamos que fueran los mejores en los grandes equipos de Europa y por ahora no se da. Pero si seguimos creyendo en nuestra calidad, muy pronto tendremos una selección Colombia que sea llena de jugadores top y que resalten los valores colombianos en los grandes equipos de Europa.