Según el informe de Medicina Legal sobre la muerte de Dilan Cruz, el proyectil disparado por el agente del Esmad que asesinó al joven bogotano fue una munición de bolsa de frijoles o bean bag round, que es un arma considerada de baja letalidad o less lethal.
Consiste en una bolsa de lona rellena de esferas de plomo o de otros materiales sintéticos dentro de un cartucho que puede ser disparado por una escopeta. Las hay de distintos calibres y fabricantes
En pruebas realizadas disparando esta munición contra cadáveres de cerdos, publicadas en la revista de medicina de Hong Kong, se ha demostrado que puede ser letal. Puede causar, por ejemplo, una lesión ocular severa y dañar gravemente cualquier otro tejido blando.
Sin embargo, los estudios sobre esta munición muestran que, en condiciones normales, no es capaz de penetrar el cartílago, tejido muscular grueso ni el hueso, aunque sí la piel.
Es una munición legal en Colombia para la policía, pero su uso está regulado por un protocolo que establece que se dispare a una gran distancia y jamás contra la cabeza.
En testimonios de policías, como el del mayor Rafael Méndez en el juicio por el homicidio del estudiante Óscar Salas, se da cuenta de que el Esmad ha modificado sus municiones y granadas introduciéndole metralla como trozos de acero, vidrios y puntillas (las llamadas “recalzadas”). Además, es una práctica documentada por múltiples videos de ciudadanos y periodistas, que el Esmad ha disparado en otras ocasiones contra manifestantes a corta distancia y contra la cabeza.
¿En el caso de Dilan Cruz se violaron los protocolos?, ¿fue un crímen de Estado? Las dudas son legítimas porque la munición le atravesó el cráneo, uno de los huesos más duros del cuerpo humano, y le llegó a cerebro. Así mismo, existen una decena de videos donde se muestra la alevosía con que el policía atacó a Dilan, apuntando a la cabeza y haciendo el disparo a menos de diez metros.
Aunque las bolsas de fríjoles sean legales, no deben ser modificadas y deben ser usadas con extrema precaución.
La violación de protocolos por parte del Esmad ha causado una decena de muertos desde que fue creado. Muchos de ellos menores de edad. Hoy todos los casos siguen en la impunidad, aunque el que más cerca está en lograr una condena es el juicio que se lleva por el asesinato del menor de edad Nicolás Neira, que fue atacado a patadas por varios policías del Esmad y que murió en 2005, muy cerca de donde asesinaron a Dilan.
¿Debe desaparecer el Esmad ?
