La misión de observación del proceso de paz de la OEA, creada en Colombia para vigilar los acuerdos de paz de los paramilitares en el gobierno de Uribe, ahora tiene concentrada su atención en el proceso de paz con las Farc. La OEA alertó a la oficina del Alto Comisionado para la situación y a la Agencia Colombiana para la Reintegración y pidió una gestión especial por parte de la policía de Medellín. La suerte de Wilson López es clave para darle garantía de seguridad a los guerrilleros de las Farc que están en proceso de dejar las armas.
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