La ministra de educación María Victoria Angulo González siempre quiso tener como su viceministro a Maximiliano Gómez, un hombre que la acompañó desde la Secretaría de Educación de Bogotá en la alcaldía de Enrique Peñalosa, y para trabajar los temas de negociaciones con movimientos estudiantiles y sindicatos profesorales que bien conoce.
Sin embargo y más por decisión de la Casa de Nariño, el nombrado en el cargo fue Luis Fernando Pérez, quien venía de ser gerente de proyectos de la Fundación Ford, a quien le tocó ponerles el pecho a los duros conflictos del movimiento estudiantil en el primer año de gobierno de Duque.
Finalmente, la ministra Angulo, tras la repentina renuncia de Luis Fernando Pérez, logró que Maximiliano Gómez, quien es economista de la Universidad Nacional de Colombia, con especialización en finanzas de la Universidad de Los Andes, sea su mano derecha en este segundo tiempo de su ministerio para manejar la educación superior del país.