"Lamentablemente el día de hoy se rompió el récord del total que había sido inédito. En 2022 ingresaron a Panamá 248.284 personas, que al día de hoy se bate ese récord con 248.901 personas", afirmó Maria Isabel Saravia, subdirectora de Migración de Panamá, a la agencia EFE este 21 de julio.
La alta afluencia de cruces en el Tapón del Darién la encabezan las víctimas del éxodo venezolano, con más de 100.000 nacionales utilizando la ruta que atraviesa esta frontera natural que conecta Sudamérica y Centroamérica. La presencia de haitianos (34.082) y ecuatorianos (34.357) en la lista suman al récord histórico ahora impuesto en este primer semestre de 2023.
"Nos encontramos ante una crisis humanitaria de grandes proporciones. Algo que Panamá no puede atender solo", subrayó Saravia sobre un año que, según estimaciones oficiales si esta tendencia sigue, terminará con alrededor de 400.000 cruces fronterizos irregulares a través del Darién.
Migrantes haitianos cruzan la selva del Tapón del Darién, cerca de Acandí, departamento del Chocó, Colombia, en dirección a Panamá, el 26 de septiembre de 2021, en su intento por llegar a Estados Unidos. © AFP/ ARCHIVO/ Raul Arboleda
La presencia de menores en los contingentes de migrantes atravesando la selva es preocupante. Según autoridades panameñas, el 21% de las personas que intentan cruzar son menores de edad, y de ellos, al menos la mitad son niños de cinco años o menos. Una situación que ha obligado a Panamá a pedir ayuda internacional urgente para lidiar con una crisis migratoria que aumenta exponencialmente cada año.
OIM: al menos 137 muertes de migrantes registradas en el Darién durante 2023
La alta peligrosidad de esta frontera natural con más de 100 kilómetros de longitud con zonas todavía inexploradas es confirmada por actores internacionales como Naciones Unidas. Según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se han reportado al menos 137 muertes o desapariciones de migrantes en el Tapón del Darién en lo que va del 2023, aunque subrayan que las cifras reales "son mucho mayores".
Panamá hace eco de las advertencias internacionales. La subdirectora de Migración panameña explicó que "el Darién no es una ruta", ya que por su terreno escabroso y el uso del territorio por bandas criminales para transportar narcóticos desde Colombia hacia el norte del continente hacen del Darién un lugar "indigno" para migrar.
"Una selva en su definición no es un lugar transitable. Es un lugar peligroso, y más cuando colinda con un área gris del lado de Colombia, donde reina el crimen organizado", remarcó Saravia que finalizó reiterando su llamado a la comunidad internacional para "atender las causas de esta movilidad".
La selva del Darién representa uno de los corredores migratorios más peligrosos del mundo, pero que a su vez es sumamente transitado al conectar Sudamérica de manera terrestre con la posibilidad del 'sueño americano'.
El fin de las restricciones implementadas por el Título 42 en Estados Unidos ha generado un aumento sustancial en los cruces migratorios en el sur, aunque no muchos llegan a la frontera entre México y Estados Unidos a raíz del fuerte control migratorio en la frontera sur de México y de países centroamericanos. Una actitud que ha sido objeto de múltiples críticas desde organizaciones defensoras de los Derechos Humanos.
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