El municipio de Uribia en el departamento de La Guajira es, sin duda, uno de los más ricos del país a pesar de sus grandes riquezas naturales: Dueño del puerto de aguas profundas naturales más grande de Latinoamérica; por su territorio pasa el gasoducto internacional hacia Venezuela; es el área pesquera más grande de Colombia y tiene dos parques naturales donde habitan especies únicas. Pero a pesar de eso en el municipio se nota, como en ninguno otro en La Guajira, la pobreza extrema y las precariedades de la vida: una de las responsables, protagonista de actos de corrupción y malos manejos administrativos en alianza con ilegales, es su dos veces ex alcaldesa Cielo Redondo Mindiola.
A comienzos de 2016 la Fiscalía ordenó su captura por corrupción y presuntos nexos con paramilitares del bloque norte, pero duró escondida varios meses en la frontera con Venezuela, hasta que consiguió negociar su entrega con el beneficio de una detención domiciliaria.
Además de ser alcaldesa en dos oportunidades, su hijo Luis Enrique Solano Redondo es el actual alcalde. Con su beneficio de casa por cárcel, Cielo Redondo anda libre por el desierto Guajiro y con toda la libertad necesaria de reacomodar sus cuadros de poder. Aunque su poder está claramente debilitado y pocos quieren hacer sociedad política con ella, lo cierto es que el coletazo de su poder aún se siente e imprime miedo en La Guajira.
Como el gobernador electo Wilmer Rodríguez le incumplió y no le ha dado ninguna participación en el gabinete, prepara su artillería: tiene fichas en la asamblea que pueden contribuir a frenarle los proyectos que proponga. La situación en Uribia no mejora. En ese municipio del que depende administrativamente y en términos de presupuesto la Alta Guajira, una zona al extremo norte del departamento donde vive la parte de la etnia Wayúu que ha sentido el efecto de las malas decisiones de los políticos en Uribia.
La ex alcaldesa también fue mencionada en un testimonio clave para la Fiscalía y que posteriormente puede entrar a jugar en la Justicia Especial Para la paz. Se trata de las declaraciones de Arnulfo Sanchez alias Pablo, el jefe paramilitar en La Guajira quien ´fue extraditado a Estados Unidos. Allí la exfiscal Martha Lucia Zamora tomó su testimonio en el que además de otros políticos menciona a la entonces alcaldesa Redondo: “La Alcaldía de Uribia era nuestra antes y después de la desmovilización. Aportábamos plata y éramos socios. A los contratistas les decían que el 10% era para estos señores (estos señores eramos nosotros las AUC)”. En Uribia estaba en el enclave paramilitar de Alias Pablo ya que se trataba de una ruta estratégica para la salida de la droga.