Escucho una voz en mi interior, me dice todo esto también pasará, tranquilo que cuando hice el mundo todo era caos. Y recuerdo cuando caí de rodillas, pidiendo a Dios que me ayudara a salir del hueco donde me encontraba, pero bueno hablaremos de eso en otra ocasión.
Por ahora, me gustaría decirte que gran parte de los historiadores y economistas coinciden en que el mundo será diferente cuando termine esta situación. De hecho, esta podría ser la oportunidad número 12 en que el curso de la historia humana cambie radicalmente, debido a un enemigo invisible pero mortal.
Para hacer un análisis objetivo, tenemos que ver qué en el siglo XIV, el mundo ya había pasado por dos pandemias, pero después de la oscuridad siempre vendrá la luz. En ese momento fue la peste negra que acabó con innumerables vidas, era algo inevitable y doloroso, aunque al finalizar dejó como resultado que en occidente surgieran inventos tan significativos como el papel, el reloj mecánico, la aplicación de la pólvora a las armas de fuego, los altos hornos, la imprenta, el sistema de biela-manivela, además de innumerables innovaciones en la navegación y la cartografía.
Después vino la viruela, esta cobró más de 60 millones de vidas en Europa, incluso dicen los historiadores que habría acabado con buena parte de la población del mundo. Según estudios, se rescata que dicha situación pavimentó el camino para la colonización de las nuevas tierras y, de paso, cambió la forma de concebir el dinero, ayudando al desarrollo del capitalismo moderno.
Para terminar de contextualizar, Hablemos del cólera, que se expandió desde el sudeste asiático, el Medio Oriente, el este de África y el Mediterráneo; la enfermedad causó pérdidas humanas incalculables, pero también les dejó a los países una idea de que debía existir la salud pública, entender la importancia de contar con sistemas sanitarios apropiados, mirar los duros efectos de la desigualdad social entre países y el impacto que este produce.
Y para sentir algo de alivio, el Covid-19 no será la excepción, si bien es cierto que es una tragedia, también nos preparamos para ver una vez más al mundo evolucionar; es aquí donde realmente empezamos a mirar algo de luz en medio de tanta oscuridad. Hoy entendemos, que era inminente la necesidad de descansar, respirar y replantearnos la vida, la necesidad que tenía la naturaleza de revivir y retomar su lugar y el impacto que esto está teniendo en el medio ambiente, que está oxigenandose para brindarnos las mejores condiciones de vida.
También es una realidad que, en medio de esta pausa obligatoria, se están rescatando las familias, se han retomando algunas costumbres y valores perdidos en la sociedad. En medio de esta crisis, le damos la bienvenida a la revolución digital. La composición del trabajo y el comportamiento de las profesiones, ha cambiado sus rutinas y se empiezan a reinventar los procesos.
También, existe toda una variedad de soluciones digitales y aplicaciones en diferentes partes del mundo que apoyan diversas áreas de la actividad productiva como son las del turismo, energía, logística, agricultura, salud, educación, gobierno electrónico y que además de contribuir a la reducción de la brecha digital, también contribuyen directamente a la mejora de la calidad de vida de las personas.
Los países terminarán teniendo fronteras digitales y se resguardará la soberanía digital brindándonos la seguridad acorde a la época. Empezaremos a escuchar de democracia digital, de gobierno digital y con esto tendremos mucha más participación.
Según el artículo Soberanía Modelo De Globalización, publicado por el diario El comercio “El 2021 se proyecta como un año de expansión, porque los países irán retomando paulatinamente sus actividades y las empresas volverán a operar con normalidad. La reactivación de la economía va en paralelo con el crecimiento del comercio. El historiador italiano Loris Zanatta cree si bien las reacciones iniciales de los países han sido de defensa de la soberanía, al final se incentivará una nueva y más radical forma de globalización y los avances tecnológicos harán que aquello sea posible, porque permitirán reducir el movimiento de personas por el mundo, que son las que propagan los contagios y las pandemias. La caída de costos a causa de la revolución tecnológica está impulsando el comercio de servicios. También ha permitido digitalizar bienes que antes eran físicos como libros o música. En la actualidad, los problemas tecnológicos ya se arreglan de forma remota”.
Esto nos da un viso de luz en medio de tanta tribulación, nos da un aliento de esperanza durante la crisis. Nos debe llevar a reflexionar qué papel vamos a jugar, como nos vamos a reinventar, cómo creceremos a través de la creatividad e ingenio y reincorporarnos productivamente a lo que viene. No todo debe ser malo también en las dificultades hay una luz de esperanza. Te invito a que cumplas todas las normas de prevención y veamos juntos el renacer de una sociedad.
GUILLERMO GÓMEZ MERLANO
Abogado Especialista en Opinión Publica Y Marketing Político
@guillogomezm