“La Realidad supera la Ficción”. Oscar Wilde.
Se denomina Ficción a la simulación de la Realidad que realizan las obras literarias, cinematográficas, historietas, de animación u de otro tipo, cuando presentan un mundo imaginario al receptor o lector. Ficción y Realidad es el resultado de ese interés académico por la escritura, y desempeña una doble función: por un lado, abre un amplio espacio para que los propios escritores expresen sus puntos de vista sobre ese dilema tan actual y arrinconado que parece no tener un final o una conclusión definitiva.
Se dice que “Don Quijote de La Mancha” fue la primera obra literaria de Ficción. Sin embargo, Miguel de Cervantes hizo algo más que publicar un éxito de ventas. Inventó una forma de escribir. Este libro trata sobre cómo Cervantes llegó a crear lo que ahora llamamos Ficción, y cómo la Ficción cambió el mundo. Un texto ficcional o ficción, es un texto cuyo mundo constituye una alternativa del modelo de mundo real. Los psicólogos creen que los personajes ficticios nos influyen en la vida real. Varios estudios e investigaciones también han confirmado lo mismo. Si bien, la Ficción puede no ser del agrado de todos, te permite participar en la vida de los demás.
Por el contrario, la principal característica de la Ficción es la recreación libre de lo real, de manera similar a lo que ocurre en los sueños, creando mundos enteros y diferentes al nuestro, por ejemplo, o tratando de responder a qué hubiera pasado si tal o cual evento en la historia ocurriera o no hubiese ocurrido. El objetivo principal de la Ficción es entretener e inspirar a todos aquellos que la leen. La Ficción nos lleva a mundos imaginarios y nos presenta personajes a los que podemos ver crecer, cambiar y desarrollarse. Nos da una idea de vidas que nunca hubiéramos tenido la oportunidad de presenciar de otra manera. La única diferencia entre la Realidad y la Ficción es que la Ficción necesita ser creíble. Usar el escritor su vida como fuente para una novela de ficción es una excelente manera de convertir sus propias historias en algo nuevo y resonante. Volver a contar y adaptar historias reales es un método probado que muchos grandes escritores de ficción utilizan para producir historias de ficción emblemáticas.
Hay cinco Tipos Principales de Géneros de Ficción: Misterio, Suspenso, Ciencia Ficción, Romance, y Fantasía; y hay tres Tipos Principales de Formas de Ficción: Cuento, Novela Corta, y Novela. La Ficción puede cambiar el mundo, pero puede hacerlo con menos frecuencia de lo que generalmente se cree. Aun así, la Ficción se evalúa constantemente, a veces con demasiada precipitación o especulación, en términos de su influencia social y moral percibida. La Realidad es la suma o agregado de todo lo que es real o existente dentro de un sistema, en contraposición a lo que es solo imaginario. Cuando confundes la Realidad con la Ficción se llama Psicosis. En algunos países de Latinoamérica, la Realidad supera la Ficción, lo que significa que muchos políticos y escritores tienen un ego fenomenal, y creen que sus obras realmente van a cambiar al mundo. Hay siete elementos de Ficción que se pueden encontrar en cualquier historia, independiente de la forma que adopte la narración. Estos elementos son: el personaje, la trama, el escenario, el tema, el punto de vista, el conflicto y el tono. Estos siete elementos trabajan juntos para crear una historia coherente. Si atendemos a una definición básica, diremos sencillamente que un texto no ficcional es el que no cuenta ni narra una historia, es decir, que tiene otras funciones como informar o instruir.
Todo lo contrario, a un texto narrativo ficcional. La Ficción es inventada, necesitas usar tu imaginación cuando la estás escribiendo. Los tipos de Ficción incluyen obras de teatro, cuentos y poemas. Hay muchos tipos diferentes de escritura de no ficción, como periódicos, anuncios, folletos, libros de referencia y biografías. Un libro de no ficción trata sobre hechos. Los diferentes tipos de Realidad Humana generalmente se presentan juntos: Realidad física, realidad consensual y realidad subjetiva. La realidad física es independiente del descriptor como la gravedad, la inercia, el funcionamiento físico-químico del mundo, el funcionamiento fisiológico, entre otros. No se puede decir que la Realidad está formada sólo por cosas materiales, ya que las emociones y los sentimientos también son “reales”. Del mismo modo, la fantasía podría considerarse como parte de la realidad en tanto hay personas que la desarrollan. Un Cuento es una narración breve de Ficción que se distingue por tener un comienzo, un nudo y un desenlace, además de mostrar un incidente que sucede en un tiempo y espacio determinados, experimentados por uno o más personajes.
Un Cuento de Ficción se trata de un relato oral o escrito en la cual se habla y describe de una manera muy detallada una historia que está muy alejada de la realidad. El término correcto de estas historias es el de ficticio, por eso pertenecen al género de la Ciencia Ficción. Una historia de Ficción debe crear su propio mundo, otorgarle la mejor ambientación, ofrecer una verosimilitud y coherencia, el desarrollo de la trama, creación de personajes, el lenguaje y el desenlace de nuestra historia. Un Cuento o historia corta, es una obra de ficción en prosa que se puede leer de una sola vez, generalmente entre 20 minutos y una hora. No hay una extensión máxima, pero la historia corta promedio es de 700 a 7.500 palabras, con algunos valores atípicos que alcanzan las 10.000 o 15.000 palabras.
Ficciones Realistas de Oscar Seidel. 1.El Viejo Metesaca Hoy es el tercer viernes, desde que el librero comenzó a cerrar el local a las cinco de la tarde. Para asombro de la policía, fue encontrado muerto junto a un libro con el lomo ensangrentado, titulado «Sexo para uno» de Betty Dodson. Aquel primer viernes, era casi de noche, cuando el librero se puso el saco y se encerró en el sótano. En los estantes había filas largas de libros. Se quedó mirando el desorden en la habitación. Abrió una puerta lateral y penetró en su dormitorio en donde había una cama, una lámpara y las incómodas sillas de madera. Se descalzó y se puso las zapatillas. Enseguida, la joven asistente de la librería fue solicitada. El viejo le dijo que, si estaba interesada en aprender de literatura, la letra con sexo entraba, y le ordenó buscar en los obsoletos libros las escenas más eróticas. A continuación, leyeron el «Kama Sutra». La empleada le narró al librero cómo aumentar la potencia sexual en el hombre con un hueso de pavo real embadurnado de semen virgen. Estaban en pleno coito, cuando llegó un carruaje. Alguien llamó con fuerza a la puerta; el librero se levantó para abrir. Una mujer alta y delgada apareció en el umbral. Lucía un vestido negro, cuyos pliegues se ensanchaban en abanico; con zapatos finos, y el pelo negro suelto y abundante. La desconocida habló con voz sensual: — ¿Podemos entrar? — Estoy muy ocupado, contestó con desaliento el viejo. Pero, se apartó de la puerta, dejando pasar a la mujer y tres acompañantes: —Estaremos callados hasta que usted pueda hablar con nosotros. Él cerró la puerta y fue a buscar sillas: —Tendrán que disculparme— dijo. Excusándose, manifestó que había empezado un coito y no podía interrumpirlo: — ¿Pueden hacer otra cosa mientras lo acabo? — Es tan desagradable, que algunas personas no pueden resistirlo —Tal vez sea mejor que salgan y esperan, les remató. —No, contestó ella, con tono impasible —Queremos compartir lo que está haciendo—El librero se fijó en la otra mujer que permanecía callada; una prostituta bajita de gordura prematura, de manos hinchadas y dedos estrangulados en las falanges como rosario de salchichas: —Estábamos esperando este momento— dijeron en coro.
Las mujeres eran Madame Bovary y la adorada Bola de Sebo. Todos salieron a la calle y fueron al carruaje que estaba estacionado, cuya estructura de madera se meció como una hamaca al entrar los personajes. Durante un largo rato, se escucharon gritos en francés y español. Terminada la faena, se bajaron del carruaje, y el viejo abrió con sus llaves la puerta de entrada a la librería. Los autores y sus personajes regresaron a la estantería de libros de donde habían descendido, y el obsceno librero le dijo sin ninguna consideración a la asistente que estaba despedida porque cometía errores ortográficos al leer. El segundo viernes, el viejo despachó a los clientes, cerró el local, y ordenó a la nueva ayudante que buscara «La filosofía en el tocador» del Marqués de Sade, antes de practicarle la prueba de conocimiento literario. Mientras la jovencita repasaba las páginas, quedó impresionada al enterarse de la iniciación de una niña de 15 años en las artes y perversiones del sexo. En ese preciso momento, el librero se inquietó porque escuchó gemidos de alguien en la otra habitación: — ¿Qué quieres? — preguntó el librero. — Solo quiero ver a la joven mujer — alguien respondió. — ¿Qué quieres de ella? — preguntó el librero. — Quiero ser capaz de entregarme a ella— dijo de improviso. — Permites? — El fisgón era Henry Miller, quien había salido de la portada de su libro «Trópico de Cáncer» para provocar «un mènage à trois». Miller los hizo vibrar con una descripción poética sobre lo asqueroso de la condición humana. Terminado el acto sexual, el viejo, que sudaba de manera copiosa, despachó del trabajo a la joven mujer por no superar la prueba de comprensión de lectura, y obligó al autor Miller que se introdujera al libro, en donde permanecía desde hacía muchísimos años. Hoy es el tercer viernes, desde que fue cerrada la librería a las cinco de la tarde. Después de haber encontrado en su lengua restos de un refinado «anilingus», la policía extrajo del bolsillo del saco del cadáver del librero, una nota explicativa de su asesinato, dejada por una fémina con muy mala ortografía: “Por realisar el beso negro, y no tener el perbertido viejo la pasiencia para enceñar a leer”