El mundo enfrenta la posibilidad de una nueva guerra mundial. Una bala equivale a una herida mínima, porque ya está en manos una fuerza bélica mayor. La ley del más fuerte prevalecerá entre las naciones, si llega a ser desatada en una selva asfáltica de alguna potencia armamentista.
Estados unidos lanzó «la madre de las bombas» en Afganistán, impactó túneles de ISIS. Pasajes subterráneos y terroristas del Estado Islámico mencionados como objetivos, por fuentes del pentágono. No obstante, EUA no es el único que cuenta con bombas nucleares, por ejemplo: El primer vicepresidente del comité de Defensa y Seguridad del Senado Ruso, Frants Klintsevich, se pronunció en su cuenta de Facebook, enfatizó que: Rusia ante cualquier agresión estadounidense dará «la respuesta más dura posible». A una posible guerra, Rusia, Reino Unido, Francia, Corea del Norte, China, entre otros países que cuentan en la actualidad con bombas nucleares, responderán.
Varios países alistan su poderío bélico. La posibilidad de una «tercera guerra mundial» enlaza algunos territorios, quienes muestran su potestad bélica ante el mundo. Por ejemplo, El Día del Sol, Corea del Norte mostró el tradicional desfile militar en Pyongyang, donde exhibieron sus avances en la industria militar. El segundo al régimen en norcorea, Chol Ryung-hae, afirmó: “necesitamos defender nuestra soberanía reforzando nuestras armas disuasorias”. Del mismo modo, El 9 de mayo, Día de la Victoria, Rusia homenajeó en la Plaza Roja de Moscú a los caídos en «la gran guerra patriótica», análogamente expusieron una pequeña parte del armamento, ya que el desfile se suspendió por condiciones meteorológicas. Al igual que otros países, muchos territorios preparan su poder bélico, ante la posible guerra.
En consecuencia, Corea del norte realiza pruebas de misiles, el Viceministro de Exteriores norcoreano, Han Song Ryol, declaró en una entrevista para la BBC, que su país continuará realizando pruebas «de manera semanal, mensual y anual»; no solo Norcorea realizó la prueba, por ejemplo EUA, también realizó la prueba con un misil balístico intercontinental desde California al Océano Pacífico. El Vocero del Comando de Ataque Global de la Fuerza Aérea, Joe Thomas mencionó que la prueba como un ensayo de rutina, no estaba enlazado con la controversia y la tensión entre Corea del Norte y Estados Unidos; mientras que el Coronel John Moss declaró para LOS ANGELES TIMES que: «El lanzamiento de esta noche es una importante demostración de nuestra capacidad de disuasión nuclear».
Nos obstante, la península coreana no desatará el primer ataque. La guerra contra Corea del Norte contiene tres factores por los cuales no se originaria. Según el politólogo Guevorg Mirzaián serían:
- Seúl dejaría de existir porque la artillería norcoreana reducirá a cenizas la ciudad, situada a tan solo a 50 kilómetros de la frontera;
- El costo de integración de una Corea del Norte destruida por la guerra sería inmenso y equivaldría a varios PIB anuales del Sur
- No hay garantías de que Pekín no se involucre en el conflicto para defender a Pyongyang.
Mirzaián añadió que: «Por eso ningún presidente estadunidense ha atacado Corea del Norte y ninguna de las crisis en la Península ha terminado en una guerra» agregó: «Todos entendieron perfectamente las reglas del juego y no cruzaron las líneas rojas». Con estas declaraciones, el analista explica la probabilidad descendente de una «tercera guerra»; lo que está sucediendo es otra crisis donde la península se ve involucrada, como la que tuvo en el 2013. Por esa razón, la península coreana, no ocasionara el ataque principal.
En síntesis, la humanidad confronta la probable guerra mundial. Un proyectil no es nada, hoy el poder cuenta con una fuerza mayor. Los territorios se enfrentaran por el puesto del más fuerte. Si esta guerra llega a las calles de algún territorio con potencia militar, ¿el caos empezará?