Uno de los hombres más cercanos a Álvaro Uribe en el gobierno de Iván Duque es Alberto Carrasquilla. Entre 2003 y 2007 fue su ministro de Hacienda, y ante el aumento de su poder en 2018 regresó a la cartera como uno de los hombres “clave” del uribismo. Pero la propuesta de reforma tributaria que Carrasquilla ha adelantado en los últimos meses ha motivado una fuerte ruptura impulsada en intereses políticos del propio expresidente.
Luego de que se conocieran las primeras propuestas de la reforma, como el IVA del 19% a sal, azúcar, chocolate, café y otros alimentos de la canasta familiar, Uribe empezó la campaña en contra de las propuestas de Carrasquilla. La clave fue la reunión del 6 de abril en Casa de Nariño, donde Uribe se fue con sus hijos Tomás y Jerónimo para reunirse con Duque, el ministro del Interior Daniel Palacios y el director del Departamento Administrativo de la Presidencia, Víctor Gómez.
Tras esa reunión, Duque anunció que no habría IVA a los alimentos de la canasta familiar, pero la publicación de la propuesta mantuvo la indignación de gran parte de la población. Entre las medidas de la molestia están el aumento de la declaración de renta a ingresos de 30 millones de pesos anuales, el impuesto a las pensiones desde $4.8 millones al mes, el IVA a la gasolina, los servicios públicos y los servicios funerarios.

Entre 2003 y 2007, Carrasquilla fue el ministro de Hacienda de Álvaro Uribe, reemplazado por Óscar Iván Zuluaga.
La última encuesta Polimétrica de Cifras y Conceptos, publicada este jueves para Caracol Radio, indica que el apoyo a la reforma tributaria es sumamente impopular. El 82% de los encuestados indicó que no votaría por un candidato que apoye el proyecto. Estos cálculos han sido impulsados por Uribe y el Centro Democrático, que aunque es el partido de Gobierno, ha liderado una gran lista de inquietudes.
Desde la radicación del proyecto, el pasado jueves, el jefe natural del uribismo anunció un “análisis crítico constructivo” en el que empezó a pedir cambios al proyecto. Aunque Uribe ha dicho que su partido apoya la reforma, ha exigido que haya cambios, lo que es un duro golpe a Carrasquilla.
Urgencia de la reforma con modificaciones
La pobreza, el desempleo y la escasez de las finanzas públicas, obligan a la reforma, lo peor para la democracia es nada hacer. pic.twitter.com/QNZqIadkP4
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) April 18, 2021
Entre estos cambios están retirar el IVA a los servicios públicos y subir los montos mínimos para el cobro de renta. El expresidente ha pedido que las pensiones solo paguen impuestos a partir de $14 millones mensuales, y que se autorice la sobretasa del 6% a las actividades del sector financiero. También ha planteado medidas de ahorro estatal que recorten en $15 billones el tamaño del Estado, incluyendo el extenso pedido de disminuir la JEP.
2.1 Ahorro estatal de 1.5% del PIB ($15 billones) recurrente es positivo, se avanza en reforma administrativa.
Insistiremos en: eliminación de Contralorías regionales, reducción del Congreso, disminución de la JEP, fusión y eliminación de entidades innecesarias, entre otros. pic.twitter.com/BGKySEf05G
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) April 17, 2021
Nota: advertimos sobre la necesidad de no exagerar en impuestos para evitar que Colombia pierda la confianza en inversión. pic.twitter.com/G06u64GHCo
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) April 17, 2021
Toda la propuesta de Uribe buscaría que la reforma sea pagada “por los más pudientes”. A pesar de la ruptura, el expresidente ha vendido el carácter social de la reforma, algo que también le ayudaría a ganar votos en los sectores más vulnerables y que serían beneficiarios de medidas propuestas como el ingreso solidario permanente o la extensión de la devolución del IVA.
Los aspectos buenos de la reforma no se excluyen con el pedido al equipo de Hda de tener receptividad a modificaciones pic.twitter.com/knelo633Ak
— Álvaro Uribe Vélez (@AlvaroUribeVel) April 19, 2021